Bloggers sí o no
Varios miembros de Vogue han levantado la voz para que se hable del poder (tal vez excesivo) de los blogueros en el mundo de la moda.
La semana ha estado divertida en relación al tema del papel de las/los bloggers. Varios miembros del staff de Vogue han alzado su voz para criticar el protagonismo e influencia de los bloggers en el mercado de la moda. Los comentarios no se han hecho esperar elpais.com, Forbes.com, playgroundmag.net, elmundo.es, lopezdoriga.com, fashtruck.com, bggroup.es, trendencias.com.
En estos momentos me viene una greguería a la cabeza: “Como me ves, te verás, como te ves, yo me ví…(piensa en mí y no pecarás)». A los medios les ha salido un ‘tiburón’, como se denomina en las películas a los ‘buenos’ que se vuelven ‘malos’ y actúan por su cuenta. El formato blog dio a luz una nueva profesión, que ha nadado por aguas cuya propiedad no estaba bien definida. En este territorio de nadie se han cruzado con las funciones de periodistas, PR, marketers, publicistas, creativas, diseñadoras, estilistas, celebrities entre otras/os. Siendo observados como intrusos y no profesionales. Como se suele decir “aprendices de nada y maestros de todo”, pero con un inmenso poder de influencia, envidiado por todos.
La convergencia de los medios de comunicación ha llevado a beber de la mayoría de recursos multimedia que ofrece Internet, fotos, vídeo, para el desarrollo de sus contenidos y también de las nuevas herramientas y formatos comunicativos, entre ellos, los blogs. Se ha dicho que la prensa de Internet tendería más a explotar los servicios que a dar información: “Escribe tu propio diario y comparte tus experiencias con el resto de los usuarios” (Hinojosa, 2004). Los medios de comunicación de moda contemplaban como su audiencia decaía sin acertar con el remedio. Fue este el momento de aplicar la máxima “Si no puedes con tu enemigo, únete a él”.
Aún así, la influencia del enemigo a seguido creciendo, los modos y las herramientas empleadas han hecho desaparecer a los autores del formato tradicional. Todos estos factores fueron muy bien recibidos por los medios de comunicación en unos momentos en los que luchaban por sobrevivir. Ahora, los protagonistas de los formatos tradicionales, están reaccionando a la defensiva ante la impotencia de los resultados. De ahí que se haya calificado de hipócrita la crítica del staff de Vogue hacía los bloggers.
Aunque, puede entenderse como una defensa frente a los efectos secundarios de la trasformación del marketing como consecuencia de la aparición de las bloggers. Las marcas prefieren tratar con bloggers que con los medios tradicionales. Desde las agencias hacen un trabajo de mentalización con las marcas para convencerlas de las ventajas de trabajar con bloggers (Fernández, 2015). Y lógicamente los grandes perjudicados son los medios.
En conclusión: El formato blog ha demostrado que lejos de estar pasado, se reivindica continuamente. El grado de exposición al que traslada a sus autores provoca un enorme poder de influencia. Esta situación pone de manifiesto la necesidad de competencia profesional de sus autores en el más amplio de los sentidos. No solo se trata de subir al escenario mediático digital, sino ser capaces de transmitir mensajes coherentes y cualificados.