El Tour de Francia se pone en hora
Combinar esfuerzo y precisión es un objetivo; conjugar lo deportivo y lo clásico, todo un reto. Los relojes Tissot siguen en la carrera.
La compañía suiza Tissot, fundada en 1853 y especializada en relojes de lujo, se ha lanzado al mercado del mundo del deporte como fuente de inspiración de una serie de colecciones que la sitúan a la vanguardia en ventas del sector. La empresa, situada en la localidad de Le Locle, en el cantón de Neuchatel, no sólo se ha convertido en una de las marcas más activas en la esponsorización del deporte, sino que ha focalizado algunas de sus exclusivas y limitadas colecciones en acontecimientos o personajes vinculados a la actividad deportiva.
El último anuncio es la puesta en escena del reloj oficial del Tour de Francia, la carrera ciclista por etapas más importante del mundo y a la que se quiere homenajear por su edición número 103 que comenzará el próximo 2 de julio en Mont-Saint-Michel. Tissot es patrocinador oficial del Tour y de todas las pruebas cronometradas organizadas por Amaury Sport Organisation, así como de la Vuelta ciclista a España, París-Niza o Flecha Valona. Ahora personaliza la serie con una línea amarilla que sobresale en la correa Nato negra, un color que simboliza el maillot que acredita el primer clasificado de la carrera francesa.
El Tissot PRC 200 especial Tour de Francia conjuga lo deportivo y lo clásico, plasmado en detalles como contadores de 30 minutos y de décima de segundo, aguja de cronógrafo central, también en color amarillo, de sesenta segundos y funciones Add y Split, hermético hasta 20 bar y con Superluminova, para una fácil lectura de las agujas. Una colección muy versátil y que afianza un compromiso entre las partes que se inició en 1988.
La nueva colección Tour de Francia se une a la creada el pasado año en colaboración con La National Basketball Association (NBA), Tissot Quickster Edition, con el escudo de cada uno de los equipos serigrafiados en la parte posterior. Con ello, la compañía suiza, miembro del grupo SWATCH, conseguía ampliar su ya sólida cartera de colaboraciones deportivas, en este caso, en el mayor acuerdo de su historia en sus más de 160 años.
También Tissot mantiene su acuerdo con el motociclismo con el T-Race Moto GP, una edición cuyas líneas y colores evocan todo lo relacionado con las motos y con elementos inspirados en este deporte, como los pulsadores, las líneas de la correa o el fondo de la caja transparente donde se puede observar un diseño inspirado en los neumáticos. Con cristal de zafiro imposible de rayar, el reloj intenta, según explica la marca, hacer sentir la adrenalina y la velocidad del motociclismo.
Precisión suiza para el mundo del deporte donde éxito y fracaso van de la mano y se deciden por décimas de segundo, innovadores sistemas para conjugar lo deportivo y lo clásico, el esfuerzo y la precisión.