El zapatero de Cenicienta
Son toda un institución en Manhattan y, por eso, tienen una cartera fiel de clientes, algunos muy famosos. Y es que cuando te gastas una suma importante de dinero en unos zapatos, solo quieres que lo toquen las mejores manos.
Unos “Manolos” no se ponen en las manos de cualquiera –nunca en las de tu mejor amiga- y por eso muchos de los clientes de la zapatería de la familia Rocco, van hasta la calle 59 con Park Avenue para arreglar sus tesoros. El establecimiento lleva abierto 80 años y, hoy en día, lo regenta el nieto de su fundador, Joe Rocco.
Sin embargo, en una ciudad como Nueva York, en la que todo es “para llevar”, tenía poco sentido que siguieran confiando en que sus clientes se desplazaran hasta su tienda, así que se dejaron seducir por Pettus Randall, un joven licenciado en Princeton, que también convenció a la reportera Rebecca Harlow de que Clobber Concierge era la continuación natural del negocio.
Hoy, zapatos, botas, mocasines… de Hermès, Prada, Ferragamo, Manolo Blahnik y Christian Louboutin resurgen de sus cenizas en una nave de 500m2 en el barrio de Queens. Este nuevo taller es uno de los servicios de reparación del sector zapatero más grande del mundo.
El funcionamiento es bastante simple, a través de su página webindicas qué le pasa a tus zapatos y ellos te envían una caja en la que deberás mandarlos al taller. Una vez listos para usarlos de nuevo te los devolverán en esa misma caja. Si quieres, aprovechando el viaje, puedes hacerlos aún más cómodos poniéndoles unas plantillas de la mejor calidad o incrementando su sujeción. Por el bolso a juego no tienes que preocuparte porque también te lo dejan como nuevo.
A los hombres nos cuesta el doble que a la mujeres: 80 dólares frente a los 40 de unos de mujer (portes incluidos), pero imagino que eso tiene mucho que ver con el número de pares que, a diferencia de las féminas, conservamos en el armario.
La tradición de este negocio compite a duras penas con las coleccionesque marcas de “moda rápida” ponen en el mercado a bajo coste y a un ritmo que Clobber Concierge no pretende asumir. No obstante, ellos defienden que la naturaleza artesanal de unos zapatos creados con las mejores hormas y materiales del mercado les confieren una longevidad que sólo ellos saben encontrar.
Con este servicio estrenarás zapatos con una diferencia esencial: garantizado que, esta vez, no te harán daño. Ya tienes la excusa perfecta para no deshacerte de ningún par, nunca más.Todas las fotos cortesía de @clobberconcierge