Coach intenta reinventarse

Desde que a mediados de 2014  Coach presentara unos malos datos de ventas, sus acciones se llegaron a desmoronar cerca de un 40%. Desde entonces, la firma americana de ropa ha estado intentando reinventarse. La segunda mitad del año fiscal de 2014 fue francamente mala debido a la caída de la demanda en EE.UU. donde factura cerca del 65% de las ventas, avivada también por el mal tiempo y el incremento de la oferta de competidores como Michael Kors.

En el primer trimestre fiscal de 2015 la entidad ha sufrido otro varapalo en sus ventas en Norteamérica, que han caído otro 19% en venta directa y un 24% en cuanto términos de ventas comparables. Esto demuestra que el Talón de Aquiles de la compañía continúa siendo la dependencia del mercado americano. En este sentido, se empiezan a ver signos positivos ya que las ventas internacionales se están incrementado, especialmente en China, donde ha crecido un 10% en el último periodo.

El consenso prevé que para este trimestre, tanto ventas, Ebitda, como beneficio neto superen los datos del trimestre anterior. Sin embargo, en términos anuales las cifras podrían ser inferiores. Los analistas del consenso de Bloomberg auguran que las ventas desciendan un -13,5% hasta los 1.228,3 millones de dólares y el Ebitda caiga hasta 321,7 millones de dólares respecto al mismo periodo del año anterior. Se prevé que el beneficio neto también descienda hasta 182 millones de dólares frente a los 297 millones de dólares registrados en el año anterior.

La entidad ha dado un giro a la forma de intentar frenar esta caída de ventas, y lo ha hecho tirando de talonario comprando la firma de calzado de lujo líder de su sector, Stuart Weitzman. En la compra también ha participado el fondo Sycamore Partners. El montante de la operación ha alcanzado los 530 millones de dólares. El objetivo es crecer vía adquisiciones y ampliar su gama de productos comprando a otra compañía líder en su categoría.

La empresa podría verse favorecida en el futuro más cercano gracias al más que probable crecimiento del PIB de la economía norteamericana en 2015.  Ésta goza de una muy buena salud por el repunte del consumo, que se está viendo favorecido por las constantes caídas de la tasa de paro y por el abaratamiento de los precios del petróleo.

Análisis: Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank