El relativo adiós de Carolina Herrera

Carolina Herrera, afortunadamente, nunca se marchará del mundo de la moda o como a ella le gusta decir, “de la belleza”. Pero después de 37 años al mando de su propia firma, ahora delega la dirección creativa en su hombre de confianza, Wes Gordon. Esto por supuesto no la hace desaparecer sino dedicarse a otras funciones como inauguraciones internacionales o acciones propias de su puesto como embajadora de su marca.

Tanto ella como sus hijas continuarán en los mismos puestos que desempeñan dentro de la empresa así que más que dejar las pasarelas o la moda, como se ha publicado, a mí me gusta decir que nunca se irá. Carolina tiene un puesto en la historia de la moda, no solo por sus aportaciones sino porque no sale una pieza de su taller sin su supervisión, como ella misma confesó hace tiempo en una entrevista a Adela Micha.

A lo largo de estos años se ha encargado de 72 colecciones, y la próxima la firmará Gordon, un creativo respetuoso con el espíritu de la casa, fundamental en toda marca, pero en ésta mucho más puesto que la diseñadora es además imagen a seguir por muchas de las clientas.

Me encanta la cantidad de mensajes que se transmiten en un desfile de moda y la imagen del fin del último de Carolina Herrera New York fue maravilloso, protocolario, elegante, detallista… Los 25 costureros con sus impecables batas blancas apoyando y “despidiendo” a la Sra. Herrera que junto con ella respaldaban a Wes Gordon como sucesor. El legado de Carolina Herrera es amplio, sobre todo para alguien que en sus propias palabras: “No sabe coser un botón”. Pero sabe dirigir equipos, tiene ojo y talento, así como pasión y disposición para el trabajo duro.

Antes de hablar de prendas icónicas, su estilo femenino, sofisticado -depurado y sin estridencias-, elegante y muy actual, sí, aunque algunos se echen las manos a la cabeza. Una working girl de alto nivel puede ir vestida de la mañana a la noche y para toda ocasión de Carolina Herrera y estará perfecta.

Los colores estandarte de la firma son el blanco, blanco y negro, el rojo, marino muy frecuentemente, toques de colores vivos, toques de gris, algún tono tierra o safari y el negro. Los estampados, fundamentalmente geométricos, los lunares y algunos toques de animal print como en la colección de despedida.

Las prendas por excelencia de la diseñadora son la camisa blanca en sus mil y una versiones -mejor con el cuello ligeramente levantado-, la falda negra lápiz o con cierto vuelo, jerséis que sustituyen a las camisas para llevar con sus famosas faldas y cinturones anchos, las faldas en tafetán de seda largas con amplio volumen (muy presentes en la última colección), sus trajes de cóctel, sus pantalones anchos y los sobre todos y chaquetas así como los ultrafemeninos vestidos que te salvan en pleno siglo XXI del temido: “¿Qué me pongo?”.

Capítulo aparte merecen las novias. Ya se dedicaba a la moda entre la alta sociedad de Nueva York, pero fue la realización del vestido de novia de la hija de Jackie Kennedy quien le dio un éxito espectacular, que ella ha sabido acrecentar y mantener hasta el top internacional.

Las novias de Carolina Herrera son románticas y muy actuales, con cortes perfectos que realzarán tu silueta y adornos muy escogidos y pensados para embellecerte y hacerte brillar con elegancia, trajes atemporales -como todos los suyos- con los que tus fotos jamás pasarán de moda -esto último es lo más nuevo en moda en trajes de novia-.

En la colección de 2018, hay trajes con pantalón e incluso, como el maravilloso conjunto de jersey y tul de Olivia Palermo que a mí me fascinó. Trajes para bailar hasta el amanecer, para bodas sencillitas y para bodones importantes… conoce perfectamente el terreno que pisa y sólo así se llega a lo más alto, pues a fin de cuentas de esto trata esta industria multimillonaria “en sus entretelas”.

Esta gran dama de la moda, no dejaría su huella en la historia si pasara sin haber hablado más que a través de sus piezas más representativas. Como todos los grandes, da su opinión y no siempre gusta a todos pero nos ha dejado algunas frases de esas que a los amantes de la moda nos encantan, y estoy convencida de que se recordarán siempre como las de Gabrielle Chanel o Karl Lagerfeld, entre otros.

Entre estas frases a mí me gustan sus consejos “anti aging”:

• “No hay nada que envejezca más a una mujer que vestirse de joven” o vístete en tu edad!
• No puedo ver a estas señoras de cierta edad con faldas muy por encima de la rodilla,… “Con cierta edad, bájate la falda!”

Y aquellas tan controvertidas sobre el empoderamiento femenino y los iconos de moda. Acerca de aquellas personas que quieren ser modelos del vestir, y se presentan en una gala como la del MET en una pura transparencia:

• “Quieres ser modelo del vestir, ¿de qué vestir, si vas desnuda?”
• Cuanto más enseñas, menos poder tienes.

Pero además Carolina Herrera es toda una influencer, en 2013 Bobi Brown iba a retirar su labial favorito (Plum Stain). En palabras de la diseñadora, había descubierto el color perfecto que podía llevar a todas horas y en cualquier ocasión. Por supuesto que utilizó todos sus contactos y compró todos los ejemplares que pudo, incluso cuando agotó todas las existencias de las tiendas movió hilos dentro de Bobbi Brown para ver si tenían reservas, esto hizo que la marca se replanteara la retirada del color y lo rebautizara como Carolina, en su honor. Y para terminar, no te pierdas este regalazo de vídeo colgado en su web, te encantará: