Las mujeres diseñadoras toman la Casa Blanca
Tras la polémica sobre quién vestiría o no a la nueva primera dama de Estados Unidos, vemos que las mujeres son las que triunfan en la familia.
Norisol Ferrari es una joven diseñadora y empresaria estadounidense de origen colombiano-venezolano. No es conocida entre el gran público. Tiene un pequeño taller en Miami y otro en Nueva York. Como tantos diseñadores, están construyendo su propia historia en el país en el que ‘El sueño americano‘ es la eterna promesa.
Noriel es hija de inmigrantes y su padre, veterano de guerra. Su vida cambió el día en el que la primera dama, Melania Trump, vistió un traje negro con abrigo para su primera visita al Cementerio de Arlington. Tras conocerse que el vestido – inspiración Kennedy- era suyo los teléfonos empezaron a sonar con fuerza. En sus primeras declaraciones a Women’s Wear Daily aseguró que «ella le quiere dar a Melania un toque personal con el que se sienta identificada«. Norisol se siente honrada de vestir a la primera dama y en sus declaraciones puntualiza que «ella está en contra de cualquier discriminación«.
Otra de las diseñadoras que toman fuerza en Estados Unidos es Reem Acra, la encargada del vestido «burbuja de Freixenet» que Melania lució en la Candlelight Dinner de Union Station, previa a la jura de su marido.Un vestido largo con cuello redondo y cubierto de lentejuelas en color champagne que destacaba entre los asistentes. Los diseños de Acra se venden en Net à Porter. Acra nació en Beirut, en Líbano y es inmigrante en Estados Unidos.
Y quien definitivamente se está convirtiendo en la musa de las Trump es Carolina Herrera. La venezolana-estadounidense es la diseñadora favorita de Ivanka Trump. Además del espectacular vestido corte princesa del Baile inaugural, Carolina Herrera ha colgado el cartel de ‘agotado’ en su vestido verde con abrigo a juego que lució Ivanka a su llegada a Washington. Conjunto de dos piezas en el color de 2017 que ha revolucionado Instagram.