Todas las veces que la reina Letizia ha tomado prestadas las joyas de la reina Sofía

La reina Letizia tiene un master en reciclar looks y ayer lo demostró nuevamente en la cena de gala que organizó el presidente de Croacia en su honor. Recuperó entonces el espectacular vestido que estrenó este año en los Premios Princesa de Girona y que sin embargo quedó en segundo plano debido a sus joyas. Doña Letizia lució unos espectaculares pendientes de diamantes talla brillante y baguette con forma de pluma, regalo del sultán de Omán a la reina Sofía en los años 80.

Así, la reina acudía de nuevo al joyero de su suegra para sorprender con estas brillantes piezas. Algo que, sin embargo, no es un hecho aislado, pues son muchas las veces que Letizia ha acudido al joyero de la reina Sofía para deslumbrar.

En 2007 Letizia lució las primeras joyas de la reina Sofía

La primera vez que Letizia tomó prestadas joyas de la reina Sofía no era ni siquiera princesa. Fue en la boda de Federico y Mary de Dinamarca, apenas una semana antes de que diera el «sí quiero» al entonces príncipe Felipe. Lo hizo para acompañar a su icónico vestido rojo de Caprile, al que añadió los famosos pendientes con forma de cereza, realizados en rubíes y diamantes.

En 2007 los volvió a lucir en la cena de gala, acompañados de otro collar de diamantes y rubíes de doña Sofía, que puede que te suene. Y es que guarda gran parecido con los pendientes que Letizia llevó hace justo un mes en su visita de Estado a Alemania. Piezas compuestos por una cascada de diamantes y rubíes que algunos medios atribuyeron a la reina Sofía, pero que en realidad pertenecen al joyero personal de Letizia.

Dos conjuntos de gargantilla y pendientes

Pues bien, tal y como hemos comprobado, las cenas de gala son el escenario preferido de la asturiana para lucir joyas de su suegra. En 2006 estrenaba un conjunto de pendientes y gargantilla de diamantes y esmeraldas que nunca más ha vuelto a lucir. Un conjunto que también cuenta con un anillo y que doña Sofía llevó en varias ocasiones en los años 70.

Dos años más tarde tomaba prestado otro conjunto de gargantilla y pendientes de diamantes inspirados en la famosa tiara prusiana. Es uno de los conjunto más especiales de la reina emérita, pues fue el que lució en su boda con el rey don Juan Carlos.

Letizia siempre confía en los pendientes de la emérita

La reina Letizia tiene una especial predilección por los pendientes de su suegra. En 2013 llevó unos pendientes de diamantes con forma de cadena que la emérita llevó a una boda y en 2017 hizo lo mismo en la visita de Macri al país con unos pendientes ovalados de coral piel de ángel enmarcados por brillantes, que luego repetiría en el Día de la Hispanidad de 2019.

Ese mismo año, en ARCO, la vimos con unos pendientes largos de diamantes de los que cuelga una perla. Los mismos que la emérita estrenó en la proclamación de don Juan Carlos en 1975, y que la infanta Elena llevó en su boda.

En Japón y Reino Unido hizo gala de las joyas de la reina Sofía

Japón fue uno de los destinos que Letizia escogió para hacer gala del joyero de la reina Sofía. En 2017 llevó en su visita de Estado unas piezas de rubíes y diamantes con el detalle de una paloma. Se cree fueron un regalo de la familia real de Arabia Saudí a doña Sofía.

Aunque no fueron los únicos, pues en la cena de gala la monarca deslumbraba con los pendientes de diamantes y zafiros de cabujón.

Estos mismos los ha vuelto a llevar dos veces en este último mes: durante su visita de Estado a Alemania y en la cena de gala en el Liceo de Barcelona.

Ese mismo año repitió fórmula para su visita a Isabel II en Reino Unido. Para la recepción en Buckingham escogió unos pendientes de perlas y oro amarillo de la emérita. En la visita a Westminster llevó unos pendientes largos de diamantes y turquesas. Estos fueron un regalo del rey Hussein de Jordania y de la reina Noor a la reina. Y para la ceremonia en la que Felipe VI fue investido caballero de la Orden de la Jarretera un broche floral de diamantes.