LVMH apuesta al caballo ganador
El mercado de cosméticos ruso es uno de los más dinámicos del mundo y a pesar de la crisis económica que sufre el país ha sido capaz de crecer a un ritmo superior del 12 % anual.
El grupo francés Moët Hennessy Louis Vuitton ha culminado la compra del 100% de la red de perfumerías ‘Île de Beauté’ tras adquirir completamente las acciones de Igor Denisov, fundador de esta gran distribuidora rusa con quien el grupo francés mantenía participaciones conjuntas. Como se indica en su página web, Île de Beauté ha pasado a ser parte de la compañía Sephora (grupo LVMH) y ocupa una posición de liderazgo en el mercado de la perfumería y cosméticos por más de diez años en Rusia. La red cuenta actualmente con 140 tiendas en todo el país, incluido un portal online que entrega cosméticos a cualquier punto del país.
La transacción tuvo lugar en noviembre de 2016 y la compra de las participaciones habría tenido lugar mediante la empresa chipriota Galonta Hold, propietaria hasta ahora de parte de Île de Beauté. Precisemos que muchos empresarios rusos utilizan compañías de Chipre, en las que tienen acciones, para realizar operaciones societarias en su país de origen y es por ello por lo que Chipre es uno de los líderes mundiales en inversión directa en Rusia. El hecho de que otros países líderes en inversión directa en Rusia sean Luxemburgo o las Islas Vírgenes, habla por sí solo de la naturaleza de dichas inversiones.
Aunque no han trascendido los detalles de la transacción, los responsables de marketing y ventas de la cadena están muy ilusionados de pertenecer a uno de los grupos del sector de lujo más potentes del mundo, lo cual sin duda dará posibilidades a Île de Beauté de ganar cuota de mercado.
Un mercado muy competitivo y con acento francés
Île de Beauté es, por volumen de ventas, el tercer minorista especializado de cosméticos y perfumes de Rusia, después de ‘L’etoile’ y ‘Rive Gauche’. Sus ingresos en 2015 ascendieron a 300 millones de euros, para conseguir un beneficio neto de 6,5 millones de euros. Por el contrario, la facturación de ‘L’etoile’ en 2015 ascendió a 1,2 mil millones de euros y ‘Rive Gauche’ facturó 500 mil millones de euros, según una estimación de RBK, agencia de noticias e informes de mercado.
Se han producido cambios radicales en el mercado desde que a principios de 2010, según estimaciones, cuando las tres grandes redes -Île de Beauté, Rive Gauche y L’etoile – controlan colectivamente más del 63% del mercado, el desarrollo activo de los formatos de compra en droguería, donde no solo se ofrecen cosméticos, sino también, por ejemplo, productos químicos domésticos, ha cambiado la estructura del consumo.
A parte de las perfumerías especializadas, dominadas por estas tres grandes cadenas, una gran parte de cosméticos (cerca del 60 %) se venden ahora en droguerías, entre las que destacan las de Magnit, la mayor cadena de hipermercados rusos. Sus formatos de tienda de cosméticos ‘Magnit Kosmetiki’ (1000 millones de EUR facturados en 2015) han crecido de manera espectacular en los últimos años, quedando muy cerca de las ventas de Létoile, la actual cadena de perfumerías líder del mercado.
Un sector muy dinámico en Rusia
El mercado ruso de cosméticos (2,2% del mundial) ocupa el cuarto lugar en Europa después de Alemania, Francia y Reino Unido. El atractivo de Rusia para el sector de la perfumería se debe al tamaño de su mercado con una población de 142 millones de habitantes, mayoritariamente de carácter urbano y su demografía: un tercio de la población – las mujeres de 20 a 60 años son los consumidores más activos de cosméticos. Su gasto anual promedio en cosméticos es de alrededor de 170 euros para la higiene personal y belleza, lo que implica gastar hasta el 30% del salario. El mercado de cosméticos ruso es uno de los más dinámicos del mundo y a pesar de la crisis económica que sufre el país ha sido capaz de crecer a un ritmo superior del 12 % anual. La apuesta de LVMH es a caballo ganador. Y más lo será a poco que mejore la coyuntura económica rusa en los próximos años.
Disclosure: El medio no se responsabiliza sobre las opiniones expuestas en el artículo. El texto ha sido escrito de manera libre expresando ideas propias, sin recibir ninguna compensación por ello. El autor no tiene ninguna relación de negocios con cualquiera de las empresas cuyas acciones se mencionan en este artículo.