Pitti Uomo, el hombre que llega
Respondemos a cinco preguntas básicas para saberlo todo de la moda masculina que viene para el próximo invierno. ¡Hombre ya!
¿Qué? El salón Pitti Immagine Uomo en Florencia como LA feria de moda masculina. Si la pasarela de Milán es el escenario que atrae los focos mediáticos, Pitti Florencia es la caldera donde todo se cuece. El certamen italiano especializado en moda de hombre cuenta con 1.219 marcas participantes y el 20% participa por primera vez. Se incrementa la participación europea con respecto a anteriores ediciones: España (+20%), Bélgica (+16%) y Holanda e Inglaterra (+14%) son las subidas más destacadas.
En la parcela nacional, presencia de firmas como Knitbrary, Sastrería El 91 (de las cuales ya hablamos en The Luxonomist), Desigual, Olimpo o Etnia Barcelona (L’altro Uomo). Una feria en la que no sólo son desfiles lo que relucen. Los mejores proveedores de productos del universo-hombre se concentran aquí. Productores de telas, firmas punteras en complementos, zapateros, marcas minoritarias o más comerciales, orfebrería, artesanía de piel. Es el escaparate masculino de referencia mundial.
¿Cuándo? Acaba de celebrarse esta segunda semana de enero. Junto con Milán, entre ambas ciudades abarcan un período de apenas tres semanas en el que todo ocurre. En esos pocos días, una sucesión meteórica de eventos, presentaciones, puestas en escena, desfiles, transacciones comerciales… Una feria (y bien de desfiles) en la que mostrar y aprender por dónde nos dará el aire a nivel moda masculina para la próxima temporada Otoño-Invierno 2016-17.
¿Por qué? Investigando un poco en el tema, según un estudio de la empresa Euromonitor, la moda masculina es uno de los sectores con más proyección de crecimiento en los próximos años. En 2014, el mercado del hombre creció un 4,5% respecto al año anterior y fijó su tamaño en 440 millones de dólares. El de la moda femenina generó en 2014 un total de 662 millones de dólares en ventas.
La diferencia entre ambos sectores se hace cada vez más pequeña, porque la tendencia apunta a que el segmento de la moda masculina sigue creciendo; el hombre medio cada vez se preocupa más de qué se pone encima y con qué se lo pone. Adjetivos y actividades hasta hace no mucho tiempo monopolizados por vosotras y que ahora compartimos nosotros.
¿Cómo? Hasta aquí los datos que explican el creciente interés sobre el tema desde todos los ámbitos, social y económico incluidos. ¿Cómo sacar algo de provecho de esta feria? Solamente es aquí donde se define la estética que tendrá vigencia en los próximos 15 meses. Es el banco de pruebas donde se deciden temas estéticos de los que nadie escapa. Aquí y ahora, una pequeña guía útil y práctica para no perderse y saber qué nos pondremos y qué no.
Redefinición de las proporciones y volúmenes. Largo de manga y bajo de los pantalones, en lo que el primero se alarga, el segundo se acorta. Enseñarás (más) los calcetines. El entallamiento extremo que reinaba temporadas atrás nos da un respiro y suelta amarras con prendas que definen la figura pero que no la encorsetan. El envasado al vacío, uf, mejor para los alimentos.
Los colores: Los investigadores de Pantone pedirán plaza en la López-Ibor si tienen que definir un color que fuese el oficial en Florencia. Porque es imposible determinar alguna gama cromática como general. Se ve de todo y para todos. Las combinaciones de color animan todo tipo de telas, de seda a lana, de vaquero a piel. Pero así avuelapluma, mejor los tonos planos, mate, en sastrería clásica y mezcla de tonos cálidos y vivos –todo tipo de naranjas, bienvenidos- para las prendas más informales.
Las prendas: Algunas mezclas infalibles de prendas que entran a la reunión de equipo desde la calle, y otras que bajan de la alta dirección a tomar el vermú. Sudaderas. Abrigos de paño. Pantalones de corte sastrero en cuadro estampado. El punto, grueso. Corbatas de rayas. Mucha zapatilla adidas (que por cierto estrena colaboración con el creador japonés Yosuke Aizawa, director creativo de la marca japonesa White Mountaineering).
La tendencia: La feria estrena el proyecto New Makers, dentro del área Make, dedicado a la sastrería y a la artesanía en general. Un espacio para empresarios de nueva generación que con su labor intentan acercar el ‘hecho a mano’ al gran consumo. Poco a poco lo veremos. Y conviviendo con la sastrería, otra sección interesante la ofrece I Play, especializada en moda urbana, que sube en presencia con nuevas marcas.
La apuesta: Visto lo visto, arriesgando y equivocándonos (o acertando, vetetúasaber), nuestra apuesta más personal apunta a que en la temporada que llega la sastrería clásica se sacudirá la formalidad de encima y aumentará su presencia en la vida diaria, desde la cola del banco al supermercado. Abrigos cortos estructurados, con buen patronaje y mejor paño. Mucho sombrero de fieltro. Una vuelta a la corbata para-con-todo.
El vaquero, desgastado y recto. Y como prenda tendenciosa a tope, la capa española (como ejemplos, Paul y Cat con su Sastrería 91 o la atractiva propuesta de la firma milanesa Caruso). Y zapatillas, ¡siempre!
En cuanto a las tendencias estéticas, en este laboratorio de ideas que es la Feria se adivinan los peinados pelín-marcados en el caso del pelocorto, el súper-con-volumen si hablamos de pelo largo; y en barbas, el hipster abandona la isla desierta recortando un tanto importante y ganan presencia los bigotes poblados.
¿Dónde? La Feria, en Florencia. Y sus propuestas, en la calle en los próximos meses. Y en el armario de cada uno, claro. *Fotografías: Pitti Uomo.