Optimismo moderado en Burberry a pesar del coronavirus

Burberry ha encajado el primer golpe de la pandemia del coronavirus con bastante soltura. Con un balance saneado y tirando de liquidez, la firma británica ha reportado unas cuentas anuales marcadas en los últimos meses por un drástico cierre de tiendas. De este modo, en su año fiscal terminado el 28 de marzo Burberry facturó 2.633 millones de libras, lo que supone un 3 % menos que lo registrado en el mismo periodo del año anterior.

El golpe de los primeros meses de este fatídico 2020 se hace notar con más profundidad en otras líneas contables. Como el beneficio operativo, que se desploma un 57 % hasta los 189 millones de libras. O las ganancias antes de impuestos, que bajan un 62 % hasta los 441 millones de libras.

Marco Gobbetti, director ejecutivo de Burberry afirma que «la emergencia sanitaria mundial ha tenido un profundo impacto en el mundo, en nuestra industria y en Burberry. Pero estoy muy orgulloso de la forma en que
hemos respondido». El directivo recuerda que la firma ha tenido que adaptarse al entorno y que la respuesta les ha permitido «descubrir nuevas formas para fortalecer nuestra conexión con los consumidores, recurriendo a nuestro negocio digital».

Las buenas noticias vienen desde China y Corea del Sur. Mercados donde la actividad comercial lleva semanas abierta y que reportan datos optimistas. Aunque con la mitad de las tiendas cerradas y la pandemia golpeando de forma distinta en varias gegiones, Burberry analiza diferentes escenarios. Porque son conscientes de que «podría tomar algún tiempo para la industria del lujo recuperar los niveles anteriores a la crisis».

Con este panorama, Burberry ha establecido varias opciones de recuperación basadas en pronósticos científicos, epidemiológicos y económicos. La compañía ha reducido gastos, ha identificado mejoras productivas y ha agilizado los tiempos de entrega de sus colecciones para responder a los clientes.

*Foto principal: Burberry