Bill y Melinda Gates se enfrentan a un divorcio de 130.000 millones de dólares
Bill Gates y su mujer Melinda han comenzado los trámites para terminar con el matrimonio que les ha mantenido unidos desde hace 27 años.
Bill y Melinda Gates se enfrentan en los próximos meses a un divorcio histórico. Quizás uno de los más millonarios de la historia y que tendrá implicaciones directas en sus proyectos profesionales y personales. Bill, de 64 años, y Melinda, de 56, utilizaron este lunes las redes sociales para anunciar que han iniciado los trámites para separarse después de 27 años casados. Sobre la mesa, uno de los divorcios más caros de la historia. En juego hay una fortuna que podría rondar los 130.000 millones de dólares.
El fundador de Microsoft es el cuarto hombre más rico del planeta. Ambos se conocieron precisamente un año después de que Bill Gates consiguiera sus primeros mil millones de dólares, cuando tenía 31 años. La pareja no tendría acuerdo prenupcial que les ayude a realizar un mejor reparto de la riqueza que han ido atesorando a lo largo de su vida. Como mínimo tienen propiedades en cinco estados norteamericanos, una enorme colección de piezas de arte, numerosos coches de lujo y un jet privado.
Bill y Melinda Gates tienen tres hijos
La pareja no ha realizado ningún comentario público más al respecto, pero en los documentos presentados al juzgado, Melinda Gates asegura que el matrimonio está “irremediablemente roto”. La familia estaría atravesando unos momentos muy complicados desde hace meses, si hacemos caso a lo que sí ha manifestado al respecto la hija mayor de la pareja. Jennifer Gates, de 25 años, ha publicado en su cuenta de Instagram que “todavía estoy aprendiendo cómo apoyar mejor mi propio proceso y emociones, así como a los miembros de mi familia en este momento y estoy agradecida por el espacio para hacerlo”. Bill y Melinda Gates tienen otros dos hijos. Jennifer es la mayor. Rory tiene 21 años y Phoebe 18.
— Bill Gates (@BillGates) May 3, 2021
En el mensaje conjunto en el que han anunciado su divorcio, la pareja afirma que tienen intención de seguir con sus proyectos solidarios. “Hemos construido una base que funciona en todo el mundo para permitir que todas las personas lleven vidas saludables y productivas. Continuamos compartiendo nuestra creencia en esa misión y continuaremos trabajando juntos en la fundación, pero ya no creemos que podamos crecer juntos como pareja en esta próxima fase de nuestras vidas. Pedimos espacio y privacidad para nuestra familia mientras comenzamos a navegar en esta nueva vida”, asegura la pareja.
La pareja quiere evitar un juicio público
La demanda de divorcio ha sido presentada en el Tribunal Superior de Washington junto a un contrato de separación que ambos habrían firmado. No se espera que el asunto acabe en juicio, pero ambos están asesorados por relevantes firmas de abogados. Melinda está representada por un equipo de cuatro abogados con sede en Nueva York de dos firmas independientes: Cohen Clair Lane Griefer Thorpe & Rottenstreich LLP y Paul, Weiss, Rifkind, Wharton & Garrison LLP. Bill está representado por tres abogados de Munger Tolles & Olson con sede en Los Ángeles. Uno de los abogados, Charles T Munger, que es socio desde hace mucho tiempo del amigo multimillonario de Bill, Warren Buffett.