El último lío para Harry y Meghan en el certificado de nacimiento de su hija
El príncipe Harry utiliza el título de Duque de Sussex para firmar el certificado de nacimiento de su hija Lilibet Diana, mientras que Meghan Merkle firma con su nombre de soltera.
A pocas horas para que el príncipe Harry regrese a Londres, la presión sobre él sigue aumentando en gran parte de los medios británicos. Los tabloides no perdonan los enconados ataques que él y su esposa les han realizado en los últimos años, colocándoles como los principales culpables de su cambio de vida. Lo último es la publicación del certificado de nacimiento de Lilibet Diana, donde Harry utilizó su tratamiento real como Duque de Sussex en el epígrafe de padre de la niña. Su esposa utilizó su nombre de soltera: Rachel Meghan Markle.
La decisión ha generado cierta controversia al poner en cuestión los acuerdos establecidos entre Buckingham y la pareja cuando decidieron abandonar sus cargos como miembros activos de la familia real. En virtud de los mismos, ni Meghan ni Harry podrían utilizar sus títulos porque sencillamente «ya no eran miembros de la realeza».
Harry y Meghan no pueden usar sus títulos de altezas reales
Sin embargo, a ambos se les ha permitido conservar sus títulos de duque y duquesa de Sussex, que la reina Isabel II les regaló el día de su boda. En la inscripción de su primer hijo, Archie, también hubo lío. Porque se utilizó el nombre de Duquesa de Sussex para referirse a la madre.
Se armó cierto revuelo al no aparecer por ningún lado el nombre de Meghan Markle. Luego se supo la decisión habría venido impuesta por palacio, algo que la propia madre de la criatura se encargó de difundir para no cargar con las acusaciones.
Nuevo revés para Harry sobre la exposición de su madre
En un país donde el protocolo y las formas siguen muy presentes, esta misma semana hemos conocido un nuevo revés para Harry. En la exposición que el Palacio de Kensington tiene organizada con el vestido de novia de su madre, la princesa Diana van a ser eliminadas las referencias a su persona.
Las etiquetas dicen de la colección: «Prestados por Su Alteza Real el Duque de Cambridge y Su Alteza Real el Duque de Sussex». Royal Collection Trust, que supervisó el préstamo de los vestidos, asegura que las etiquetas son «incorrectas y se actualizarán», citando un «error administrativo».