Alessandro Michele prepara su salida de Gucci tras ocho años como director creativo
La dirección de Kering habría perdido la confianza en el diseñador romano tras ocho años al frente de la creatividad de Gucci.
Las sedes de Gucci y su empresa matriz, Kering, viven horas de intensa actividad y rumores tras hacerse público que Alessandro Michele podría estar preparando su salida. Oficialmente los portavoces de ambas firmas en Milán y París no tienen comentarios al respecto. Al parecer, François-Henri Pinault, presidente de Kering, no estaría muy conforme con la evolución de la marca italiana y habría exigido al máximo responsable de la creatividad de Gucci en los últimos ocho años un cambio de rumbo. Un toque de atención que al parecer no sería el primero, pero que sí podría ser el último.
François-Henri Pinault ya sorprendió al sector en noviembre del año pasado cuando destituyó contra todo pronóstico a Daniel Lee de Bottega Veneta. A Lee, que ahora dirige la creatividad en Burberry, le sustituyó Matthieu Blazy.
Alessandro Michele lleva ocho años dirigiendo la creatividad de Gucci
Diversas fuentes señalan que el presidente de Kering podría estar pensando en realizar una destitución similar. Todo ello a pesar de que las colecciones de Alessandro Michele reciben elogios temporada tras temporada.
Su principal defensor en Gucci siempre ha sido Marco Bizzarri, el presidente y director ejecutivo de la marca italiana. Fue precisamente él quien puso a Michele al frente de la dirección creativa de Gucci una semana después de que Frida Giannini abandonara su puesto en 2014. Pero dicen que la relación entre ambos se ha enturbiado.
Alessandro Michele estaría trabajando para la presentación de su próxima colección en la Semana de la Moda de Milán en enero. Ahora todo está en el aire. Las colecciones del diseñador romano han contribuido a modernizar la marca y sus colaboraciones han conseguido atraer a un público joven.
Eso se ha dejado sentir también en las cuentas de Gucci, que comenzaron a crecer en porcentajes de dos dígitos constantes durante muchos trimestres. La alarma se desató el mes pasado, cuando Kering reportó unos ingresos de Gucci inferiores a los de otras marcas del grupo. Lo 2.600 millones de euros ingresados con un crecimiento del 9 % podrían reflejar un agotamiento del modelo.
