La falda-toalla de 700 euros, la última locura de Balenciaga
Balenciaga ha despertado al ira del público al sacar a la venta una falda que imita la toalla que tenemos todos en casa por 700 euros.
Balenciaga se ha convertido en el niño rebelde del mundo de la moda. Frente a las creaciones novedosas, innovadoras de otras firma de lujo, ella apuesta por despertar el clamor social y la ira de los consumidores. Esto es lo único que podemos sacar en claro de su última propuesta para la primavera/verano de 2024. Una falda/ toalla o, para que me entiendas mejor, la toalla que todos tenemos en casa y que nos atamos a la cadera para secarnos después de la ducha.
La falda toalla viral de Balenciaga
Este fin de semana las redes sociales han ardido al conocer el último lanzamiento de Balenciaga. Se llama Towel skirt y, como su nombre indica, es una toalla falda. La firma ha decidido copiar el estilismo que todos lucimos cada mañana al salir de la ducha y convertirlo en una prenda de alta costura.
La «prenda» está disponible en color beige, es de largo midi y se sujeta a la cadera con dos botones situados en la parte interna y un cinturón. El resultado final es exactamente igual al que luces tú con tu toalla cada mañana, pues los botones y cinturón quedan escondidos a la vista. La única diferencia entre tu toalla y la de Balenciaga es la etiqueta con el nombre de la firma y, por supuesto, el precio.
Y es que la Towel skirt cuesta la friolera de 695 euros. Algo «quizás» exagerado por una toalla exactamente igual a la que puedes conseguir en cualquier tienda por menos de 20 euros.
Las últimas locuras de Balenciaga
No es de extrañar que pronto hayan aparecido imitaciones del diseño. Más aún cuando la falda de Balenciaga ya está agotada y aún no ha empezado a venderse. De momento está disponible en dos tallas, S y M, y de la primera ya no quedan unidades. De la talla M pueden pedirse por anticipado, pero después del revuelo formado, si la quieres, debes ser rápida.
Sin embargo, la falda toalla no es la única locura de la última colección de Balenciaga. En ella podemos encontramos las botas bolso por 2.400 euros, o la bolsa de rayas que llevaban nuestras abuelas a la compra por 2.500 euros.
Estas se unen a otras extravagancias pasadas como la bolsa-bolso de patatas Lays, sus zapatillas rotas de casi 1.500 euros o la bolsa de la compra que también se agotó en las tiendas.