Más del 40 % de los españoles cambiaría de trabajo si tuviera un sueldo vitalicio
Del total de las personas encuestadas por el Observatorio NESCAFÉ, menos de dos tercios están satisfechos con su trabajo.
Si el trabajo no se escogiera en función del salario, sino por el atractivo o la vocación, los españoles se decantarían por otra profesión. Esta es una de las conclusiones elaboradas por Nescafé en un estudio que ha impulsado con motivo de un especial aniversario. Se trata del cuarenta aniversario de El Sueldo para toda la vida. Un sorteo que supone anualmente una dosis de ilusión para muchos cafeteros.
En sus cuatro décadas de historia, la filial de Nestlé ha repartido felicidad en 26 provincias españolas. Comenzó entregando 50.000 pesetas al mes, unos 300 euros, y actualmente el ganador se lleva 2.000 euros al mes para el resto de su vida. Una cantidad que refleja cómo ha variado el coste de la vida desde los años 80.
El sueldo Nescafé ha recalado principalmente en mujeres
Detrás de este apreciado sorteo existen tantas historias como premiados. Curiosamente, el 80 % de los sueldos para toda la vida en recalado en mujeres. Y es que ellas son tradicionalmente las que recopilan las etiquetas o los códigos y las que han acabado participando con mayor asiduidad.
En cualquier caso el premio les cambió la vida o por lo menos la manera de enfocar sus objetivos vitales desde entonces.
Un sueldo para cambiar toda una vida
El Observatorio Nescafé ha entrevistado a más de 2.600 españoles de entre 18 y 55 años para preguntarles qué harían si les tocara El Sueldo para toda la vida de Nescafé. Casi la mitad (40 %) reconoce que se tomaría un año sabático y solo el 16 % de los encuestados lo ahorraría íntegramente.
Cambiar de trabajo, montar su propio negocio, viajar, tener una mayor calidad de vida, ampliar la formación o cambiar de vivienda o de coche serían los principales destinos de un dinero extra que da para mucho. De hecho solo un 20 % de los encuestados dejaría de trabajar en caso de ser premiado.
El premio les permitiría conseguir esa confianza que les falta para alcanzar lo que se desea profesionalmente. El 26 % de los encuestados asume que la limitada capacidad económica frena la búsqueda de su profesión ideal.