Bradley Cooper confiesa que tardó ocho meses en querer a su hija
Bradley Cooper se confiesa sobre la relación que tiene con su hija y cómo se sintió cuando ésta nació en 2017.
Muchos podrían calificar a Bradley Cooper como uno de los padrazos de Hollywood. Es muy habitual verle junto a su hija en el parque, recogiéndola del colegio o paseando con ella y su madre, Irina Shayk. Por ello, las últimas declaraciones del actor sobre su pequeña han impactado a sus fans. Y es que lejos de definir a su hija como uno de los amores de su vida, Bradley Cooper ha confesado que le costó quererla y que hasta pasados ocho meses de su nacimiento no sintió verdadero amor por ella.
Bradley Cooper confiesa que no quería a su hija
Así lo ha confesado en una entrevista para el podcast Armchair Expert, un programa presentado por su gran amigo y también actor, Dax Shepard. Los dos actores hablan de Lea de Seine, la niña de seis años fruto de su relación con Irina Shayk, que ahora ha dado el salto al cine en la última película de su padre.
En un momento de esa conversación se paran a hablar del nacimiento de la pequeña y Cooper confiesa que él no la quería. «Los primeros ocho meses… La verdad es que ni siquiera sabía si quería a la niña», revela el actor. «Es una pasada, muy guay. Estoy viendo cómo todo esto evoluciona y de repente mi experiencia es total. Fascinado con todo ello. Encantado de cuidarla. Pero ¿moriría si alguien entrara con una pistola?», reflexiona.
Asegura que su hija le salvó la vida
Sin embargo, asegura que ahora está completamente enamorado de su hija y que incluso le ha salvado la vida. «No estoy seguro de si estaría vivo si no fuera padre», revela. «Porque esto va a dictar todo lo que hagas a partir de ahora. Tu ADN va a decirte que hay algo que es más importante que tú”.
Por ello, cuenta que no quiere cometer los errores que tuvo su padre con él y que trata de pasar el máximo tiempo con su hija. «Pienso mucho en cómo mi relación con mi hija impactará en su crecimiento y en su viaje personal. Va a cumplir siete años en marzo y ya sabes cómo era mi relación con mi padre. No pasé demasiado tiempo con él. Creo que ya he estado más horas con mi hija que las que pasé con mi padre en toda su vida. Una locura».