El refrescante plan de Puy du Fou España para disfrutar este verano
Puy du Fou España fusiona este verano gastronomía y espectáculos para ofrecer una refrescante propuesta en os meses más calurosos del año.
Puy du Fou, el parque temático dedicado a la historia de España, afronta su cuarto verano en nuestro país con una firme apuesta por sus espectáculos más aclamados. A ello suma durante el periodo estival una serie de experiencias gastronómicas, para aquellos que buscan planes distintos cerca de Madrid durante los meses de más calor.
Precisamente por ello, para mejorar la estancia de los visitantes en verano, el parque ha instalado más de 9.000 metros cuadrados de pérgolas y toldos por los caminos. También se han plantado durante esta temporada cerca de 20.000 ejemplares de árboles y arbustos. Con gran sentido por el entorno donde se ubica, se han priorizado las especies autóctonas frente a las ornamentales, para aportar frescor al peculiar viaje por la historia.
Actividades refrescantes para rebajar el calor
Porque quizá el calor reinante en Toledo durante el verano sea el mayor enemigo de este parque temático que, por lo demás, no deja de sorprender al visitante desde que se cruza sus puertas. Fruto de ello sus responsables han conseguido que combatir el calor se convierta también en una atracción.
Durante la visita estival se puede disfrutar de actividades refrescantes. Como las Estacas del Aguador que están repartidas por todo el parque, las divertidas duchas repentinas que refrescan los caminos o Los Surtidores del Lazarillo, un circuito de surtidores de agua y fuentes danzantes.
Puy du Fou España sigue sorprendiendo en verano con sus espectáculos
Como muchos ya saben, en Puy du Fou no hay atracciones mecánicas. Ni falta que hace para pasar una tarde o un día de lo más entretenido viajando por la historia. Porque sus espectáculos y propuestas tienen atractivo y premios.
A Pluma y Espada ha sido galardonado por la IAAPA con el premio a la «Mejor Producción Teatral» y El Último Cantar fue reconocido en 2021 como el «Mejor Espectáculo del Mundo».
El parque creado Philippe De Villiers está repleto de detalles que sorprenden y entretienen con la historia de España como fuente de todo. El colofón sigue siendo El Sueño de Toledo, que este año tendrá 152 funciones para que nadie se quede sin emocionarse con el viaje por 1.500 años de historia de nuestro país. El espectáculo ha aumentado la capacidad de sus gradas en 1.000 personas más llegando a un aforo total de 7.000 espectadores por noche.
Nuevos espacios y renovada oferta gastronómica
Pero es que además en estos meses se ha creado una experiencia gastronómica completa con el llamado Menú de Verano. Un exclusivo menú que ofrece una variedad de platos frescos y ligeros inspirados en ingredientes de temporada y sabores de la tierra.
Una gastronomía que puede disfrutarse en varios espacios de El Arrabal, un entorno inspirado en el Siglo XIII. Como la parrilla de El Rincón del Herrero o la cervecería artesana de El Llagar de Covadonga.
Puy du Fou ha preparado además este verano música en directo todos los días antes de que dé comienzo El Sueño de Toledo. Una propuesta ideal para disfrutar de la mejor gastronomía antes de ver el espectáculo nocturno más grande de España.
A ello se une la propuesta gastronómica en El Askar Andalusí. Un espacio ambientado en la Batalla de Simancas y que rememora el campamento militar del gran califa Abderramán en plena meseta castellana. Es la representación de la España Andalusí.
La exclusiva propuesta de El Salón Califal
Allí está El Salón Califal, el nuevo restaurante con espectáculo que te hace viajar a las antiguas tradiciones de la antigua Al-Ándalus.
En el nuevo restaurante se podrán degustar manjares árabes como muhamara, tajini y baba banoush entre otros. Sin duda, una apuesta gastronómica única y exclusiva para los apasionados de la cocina árabe y para aquellos que quieran descubrir nuevos sabores.
En la cercana terraza exterior del Mezze de Ziryab se puede disfrutar de un té moruno, frío o caliente,
según la temporada y los gustos, con hierbabuena y canela, acompañado de un surtido de dulces
árabes -a base de almendras, azúcar y almizcle- y un sorbete de lima limón.
Y todo ello desde un mirador natural con los Montes de Toledo al fondo del valle para contemplar un atardecer de ensueño.