Cuadros que se quedan en blanco para proteger los océanos
Bajo el nombre de ‘Last Call for Beauty’, Ocean us blanqueará cuadros famosos para concienciar sobre la extinción de los arrecifes de coral en los océanos del mundo.
Las obras maestras más famosas de los museos más prestigiosos del mundo se están “blanqueando”, al igual que están perdiendo color los arrecifes de coral de todo el mundo. Este es el mensaje de la campaña de la fundación Ocean us, ‘Last Call for Beauty’, que denuncia la alarmante pérdida de coral en los océanos y con la que pretende activar una campaña de captación de fondos para el proyecto Global Coral Restoration.
Desde el Palacio de Versalles y el Museo Albertina hasta el Prado, el Thyssen, el Guggenheim y la Galería Nacional de Victoria, muchos museos importantes se han sumado a esta iniciativa. Con ello mostrarán hasta diciembre de 2024 una selección de obras que ha ido perdiendo su color.
Ocean us quiere concienciar al planeta de que un mundo sin color
Los nenúfares de Monet; El Caballero de la Mano en el Pecho, de El Greco; El Grito, de Munch; el Paseo a Orillas del Mar, de Sorolla; y así hasta once obras imprescindibles de la pintura universal se vuelven grises y sin vida. Simbolizan la destrucción de este importante ecosistema hasta llevarlo a la extinción.
De hecho, Linda Neugebauer, fundadora de Ocean us recuerda que “un océano sin arrecifes de coral en funcionamiento es impensable. Albergan una cuarta parte de todas las especies marinas y son esenciales para la supervivencia de muchas comunidades costeras”.
Por ello, su objetivo pasa por concienciar al planeta de que un mundo sin color es un mundo sin vida y recaudar fondos para el primer proyecto de la fundación, Global Coral Restoration. Junto con los principales científicos marinos del mundo y expertos de otras disciplinas, pretenden restaurar nueve millones de metros cuadrados de arrecifes dañados en todo el mundo para 2030. Un ambicioso proyecto con el que pretenden preservar entorno muy necesario para la vida en nuestro planeta.