Un gigante renovable mundial de origen español
La filial estadounidense de Iberdrola gana terreno en energía eólica marina tras una nueva adjudicación en el Golfo de Maine.
Iberdrola, a través de su filial estadounidense Avangrid, se ha proclamado la gran ganadora de la primera subasta de eólica marina en el Golfo de Maine, situado en la costa este de Estados Unidos. La compañía trabajará para desarrollar las áreas de arrendamiento, con el potencial de entregar 3 gigavatios de energía limpia, para ayudar a satisfacer las necesidades energéticas de la región de Nueva Inglaterra y avanzar en el objetivo eólico marino de 30 GW de Estados Unidos.
Tal y como ha dado a conocer la Agencia de Gestión de Energía Oceánica (BOEM, por sus siglas en inglés), Avangrid ha obtenido los derechos sobre dos áreas estratégicas en la costa, por un valor total de 10 millones de euros.
Iberdrola prosigue su expansión en Estados Unidos
«Avangrid se enorgullece de asegurar dos áreas de arrendamiento en la subasta de hoy con el potencial de entregar 3 gigavatios de energía limpia a la región de Nueva Inglaterra, lo que afirma nuestra posición como líder nacional en la industria eólica marina de los Estados Unidos y se basa en la cartera global de energía eólica flotante del Grupo Iberdrola», dijo el CEO de Avangrid, Pedro Azagra. «Asegurar estas áreas de arrendamiento brinda una oportunidad única para avanzar en nuestro negocio en crecimiento a un valor significativo y refuerza nuestro compromiso inquebrantable de ayudar a la región de Nueva Inglaterra a satisfacer su creciente necesidad de energía limpia y confiable».
El segundo gran adjudicatario de la subasta celebrada por la administración Biden ha sido Invenergy. La compañía de origen estadounidense ha asegurado también dos áreas clave para el desarrollo de proyectos offshore en la costa este del país, por un total de 9,9 millones de euros, ubicados a 46,2 y 21,6 millas de las costas de Maine y Massachussets, respectivamente.
Los próximos pasos en Estados Unidos
Sin embargo, los permisos otorgados en la subasta no autorizan aún la construcción de infraestructuras eólicas. En los próximos meses, las empresas deberán presentar sus planes de desarrollo a la BOEM. Realizará un Estudio de Impacto para evaluar los efectos potenciales de estos proyectos, en consulta con las tribus locales, gobiernos y el público.
Además de la concesión de los terrenos, la subasta incluye compromisos para fomentar la capacitación de la mano de obra y el desarrollo de la cadena de suministro local. Además de inversiones en medidas de compensación para el sector pesquero, con un valor total de 5,4 millones de dólares en créditos. A esto se suma también que las empresas adjudicatarias, como parte de los términos de la subasta, deberán también cumplir con acuerdos laborales para la construcción y establecer planes de comunicación con comunidades indígenas y pesquerías locales.
Como uno de los mayores desarrolladores de energía renovable del país, Avangrid tiene una cartera de 9 GW de más de 75 instalaciones eólicas y solares en 25 estados, generando suficiente energía para abastecer a más de 2,8 millones de hogares en todo el país.