Las estrellas Michelin, el vino y el aceite atraen a los turistas de lujo a nuestro país
El turismo gastronómico es uno de los pilares de nuestro país, al que los turistas de lujo se suman atraídos por varios productos patrios.
El auge del turismo -y del turismo de lujo- en España vivido tras la pandemia no se entendería sin la labor de nuestra gastronomía. Esta es una de las conclusiones a las que llegan numerosos expertos de ambos sectores, ligados irremediablemente y que constituyen uno de los pilares fundamentales de nuestra economía. Nuestro país, con 88,5 millones de turistas extranjeros hasta noviembre pasado, superó entonces ya los 85 millones de viajeros que registró en todo 2023.
Como segundo destino mundial por detrás de Francia, su posición no podría entenderse sin su gastronomía. Y ello se nota en los ingresos. Según los datos aportados por KPMG en su último informe sobre el sector, los turistas internacionales gastaron 17.232 millones de euros en gastronomía en 2023. Es un 24 % más que antes de la pandemia. De 166 euros que se gastaban en 2017, se ha pasado a más de 202 euros.
Estrellas, aceite, jamón y vino atraen al turismo de lujo a España
Los expertos relacionan este éxito irremediablemente a la calidad de nuestra oferta. Algo que se nota en los principales listados y premios del sector. España es el quinto país con más restaurantes galardonados con Estrellas Michelin. Para The World´s 50 Best Restaurants, 5 restaurantes españoles están entre los mejores del mundo, lo que posiciona a España como el país con más establecimientos premiados, por delante de Francia e Italia.
En ello tienen mucho que ver ingredientes básicos de nuestra dieta mediterránea, como el vino, el jamón o el aceite de oliva.
Un ejemplo lo tenemos en el enoturismo, que no para de crecer en España. Según datos de ACEVIN, casi tres millones de personas visitaron las bodegas y museos del vino en 2023, un 18,2 % más. Su gasto promedio por persona superó los 200 euros. Es un 24,5 % más que en 2020.
Nuestro jamón ibérico de bellota ha sido elegido como el mejor producto cárnico mundial en el ranking Best Meat Products y hasta 32 aceites de oliva españoles están entre los mejores del planeta según el ranking World’s Best Olive Oils. Incluso nueve de ellos tienen el packaging más cuidado y bonito del mundo.
Las experiencias ganan peso en la oferta gastronómica
La gastronomía constituye un elemento diferencial de la propuesta de valor de España como destino turístico. Es una variable cada vez más relevante para diversificar y atraer turismo de calidad, dada la creciente búsqueda de experiencias gastronómicas memorables por parte de los viajeros.
Como dicen desde KPMG, la demanda de autenticidad ha llevado a muchos restaurantes a rediseñar su propuesta de valor. Se ha pasado de menús tradicionales a experiencias inmersivas que transmiten la esencia cultural del lugar que se visita.
Esto significa que no solo se consume un producto, sino que se vive un viaje sensorial que puede incluir desde la ambientación del local hasta el storytelling del plato.
El turismo de lujo se enamora de nuestra gastronomía
Ello ha convertido a la gastronomía española como uno de los principales atractivos para el turismo de lujo y premium. Muchos turistas ven en la cocina un elemento diferenciador que los acerca de manera auténtica a la identidad del país.
Un turismo gastronómico que genera además un impacto positivo en la economía local, al atraer viajeros dispuestos a invertir en experiencias exclusivas. Tal y como indica Miguel Sanz, director General de Turespaña, “la diversidad regional de la gastronomía les ofrece una experiencia única haciendo que su estancia sea más memorable y atractiva”.