Blue Banana mira a México, Italia y Alemania para brillar en 2024
La firma de moda española estima que superará los 28 millones en ventas en este nuevo año.
Corren buenos tiempos para Blue Banana. La marca de la X que ha conquistado a los jóvenes ya mira a su gran expansión internacional y 2024 comienza con un gran reto. Se trata de ampliar sus puntos de venta, tanto en España, como en Europa y América Latina, para alcanzará una facturación de 28 millones de euros.
La firma ha asegurado que sus icónicas prendas llegarán a Ciudad de México en las próximas semanas y más adelante a tiendas multimarca de Italia y Alemania. También planean inaugurar siete nuevos puntos físicos propios en España, además de seguir creciendo de la mano de El Corte Inglés.
Blue Banana facturó un 52 % más en 2023
Así, continúa apostando por una estrategia omnicanal. Gracias a ello inauguró en 2023 tiendas en Córdoba, Vigo y Santander, además de nueve ‘corners’ en El Corte Inglés. En total suman 23 puntos de venta físicos propios en España, todos ellos «rentables», aseguran. Además, Blue Banana ha logrado establecerse en tiendas multimarca de Canarias, Ceuta, Melilla, Portugal y Uruguay, que se unen a las que ya funcionaban en Andorra y Puerto Rico.
Todo esto le ha permitido facturar 19,32 millones de euros en el ejercicio de 2023. Es un 52 % más que en 2022, cuando los ingresos se situaron en los 12,7 millones de euros. Un hito que ahora pretende repetir de cara a 2024. De las ventas totales, un 38 % corresponden a la facturación ‘online’, 43 % a ‘retail’, un 13 % a El Corte Inglés y el 6 % restante a otros canales.
Una empresa comprometida con el medioambiente
Además, a finales de año lanzó sus primeras zapatillas deportivas, Wanderer, en dos tonos (navy y grey), inspiradas en las clásicas zapatillas de ‘skate’ para ampliar su negocio. Siempre manteniendo su apuesta por la sostenibilidad, al fabricarlas con piel reciclada.
De hecho, ya marcó un hito en 2021 al convertirse en la primera marca de ropa española en negativizar sus emisiones de carbono. Es decir, compensa el doble de las emisiones de CO2 que genera, financiando proyectos de purificación del aire coordinados por las Naciones Unidas.