El inventario genera dudas en la evolución de Tapestry
La propietaria de Coach, Kate Spade y Stuart Weitzman, que acaba de comprar Capri Holdings, intenta terminar el año en positivo.
Tapestry presentó recientemente unas cuentas trimestrales por encima de lo esperado por los analistas. Sobre todo en el volumen de ventas que, pese a ser algo menor del estimado inicialmente, consiguió superar los 1.500 millones de dólares. Una cifra generosa que supone un 1 % más que lo obtenido en el mismo periodo del año anterior.
El crecimiento en Japón y en China han contribuido de manera significativa a las cuentas del grupo que gestiona marcas de lujo como Coach, Kate Spade y Stuart Weitzman.
El volumen de inventario de Tapestry genera dudas
Desde Tapestry afirman que las cuentas «demuestran el poder de la construcción de marca y el enfoque en el cliente, respaldados por la creatividad de nuestros talentosos equipos globales y la ejecución disciplinada. Durante el trimestre, impulsamos ganancias de ingresos a tipo de cambio constante, una expansión significativa del margen bruto y un crecimiento de EPS ajustado de alto nivel».
Si bien las cuentas muestran una tendencia estable en un sector del lujo que se muestra dubitativo en los últimos meses, a los analistas les preocupa el nivel de inventario alcanzado por las principales marcas que gestiona Tapestry. Un apunte contable que sin embargo ha mejorado algo en el último trimestre.
La compañía mantiene un atractivo reparto de dividendos
Las acciones de Tapestry llevan un año complejo. Su cotización ha bajado casi un tercio desde enero. Desde sus máximos históricos alcanzados en mayo de 2021, los títulos han vivido un declive del 42 %. Sin embargo, la empresa mantiene un atractivo reparto de dividendos con el que pretende atraer a los inversores. Espera devolver aproximadamente 325 millones de dólares a los accionistas a través del pago de dividendos. Ofrece 1,40 dólares por acción, un aumento del 17 % con respecto al año anterior.
En agosto pasado, Tapestry aprobó la compra de Capri Holdings, el conglomerado detrás de la icónica marca de lujo Versace. El acuerdo se concretó mediante un pago a los accionistas de Capri de 57 dólares por acción en efectivo, elevando el valor total de la operación a los 8.500 millones de dólares. Capri aporta firmas como Versace, Jimmy Choo o Michael Kors. Las ventas anuales combinadas de las seis marcas deberían superar los 12.000 millones de dólares.