El lujo británico pendiente del Brexit

A vueltas con el Brexit y sus consecuencias políticas, las empresas de lujo miran con preocupación los efectos que tendrá la salida del Reino Unido de la Unión Europea. Jaguar Land Rover es una de las empresas que más presionan para buscar la mejor salida al entuerto porque sus coches se venden principalmente en suelo continental. «Necesitamos de forma urgente una mayor certidumbre para seguir invirtiendo con fuerza en Reino Unido y proteger a nuestros proveedores, clientes y 40.000 empleados en territorio británico». Unas palabras del consejero delegado de la automovilística, Ralf Speth, que siguen retumbando en los despachos del ejecutivo británico.

En los primeros seis meses del año Jaguar Land Rover ha vendido en todo el mundo 318.219 unidades, un 0,4 % más. Land Rover es la marca que tira del grupo y aunque sus ventas «disminuyeron levemente en junio, ya que China espera una reducción de los aranceles a la importación de vehículos a partir de julio. Esto fue en gran medida compensado por los aumentos en las ventas en el Reino Unido, Estados Unidos y nuestra región de ultramar» dicen desde la empresa.

Veremos cómo acaba el asunto y qué solución comercial se alcanza finalmente, porque compañías ligadas al lujo como Jaguar Land Rover aseguran que el «comercio libre y sin fricciones con la Unión Europea, así como un acceso sin restricciones al mercado único» es fundamental para garantizar el futuro del negocio.