¿Levanta cabeza Mulberry?

Algo pasa con Mulberry. O algo pasaba. En realidad muchas cosas al mismo tiempo. La pérdida de identidad (que ni siquiera el fichaje como Directora Creativa de una de sus colecciones de Cara Develigne lograba encontrar) era tan solo una de ellas. Los precios altísimos de unos productos «made in Britain», que sin embargo no tenían ni la clase, ni la fama de Murberry pretendiendo competir con Burberry en precio, otra. Al final, caída en picado en las ventas y semi revolución dentro de la casa británica, cuya crisis se cerraba hace un mes con el fichaje de Thierry Andretta como su nuevo CEO y responsable de trabajar junto a Johnny Coca, nuevo director creativo de la firma y ex- Celine. Coca se incorpora este verano a la empresa.

Y entretanto, Mulberry decidió cambiar de estrategia. En vez de vender bolsos carísimos a precios imposibles y con una calidad que no se correspondía, decidió bajar los precios para competir en un segmento que podía liderar. La estrategia parece que ha dado resultado, de hecho la semana pasada Mulberry anunciaba que el control de costes, unido a la rebaja de precios estaba funcionando y que batirían las expectativas del mercado. Hacía varios trimestres que no salía un comunicado tan positivo de Mulberry. Bruno Guillon abandonó la multinacional porque pretendió hacer de Mulberry un Hermès, y claro, Hermès sólo hay uno.

La multinacional  anunciaba la semana pasada que  su colección de primavera /verano en el que se incluyen bolsos en un rango de precios de entre 743 dólares y 1.189 dólares estaba funcionando muy bien en ventas. El aumento de las ventas al por menor – de al menos un 1% frente a las previsiones iniciales-  sería compensado por una fuerte disminución de los ingresos al por mayor. Poner las cuentas en orden no está siendo fácil y Mulberry espera que los ingresos a 31 de marzo sean un 10% menores hasta los 148 millones de libras esterlinas.

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