El metaverso, Hermès y… ¿el futuro?
El Metaverso se ha convertido en algo así como "El universo virtual donde hay que estar, pero solo para ricos".
El metaverso. Palabro. Desde que me lo descubrió Zuckerberg en un vídeo a caballo entre los dibujos animados y la grima no hago más que intentar entender cómo es posible que suceda todo lo que dicen que sucederá. Es más, me entran escalofríos sólo de pensar que vamos a sustituir la emoción de preparar viajes a lugares lejanos, buscar hoteles recónditos, descubrir olores y sabores extraordinarios para quedarnos en el sofá de casa con unas gafas 3D mientras comemos un poquito de quinoa conectados al Metaverso.
El mundo virtual para ricos
Así habrá varios mundos del Metaverso. Porque claro, en la realidad virtual habrá mundos para ricos, riquísimos y pobres. La clase media habrá desaparecido en medio de un mar de impuestos y de estados-papás que subvencionarán desde el sofá hasta el plato de quinoa.
Pero mientras llega ese universo B accesible para los pobres, se está creando un universo A. El guay, el de los ricos. Y es que en el ciberespacio de los gigabytes y los super-animadores de espacios virtuales ya se venden terrenos inexistentes por miles de dólares. Unos terrenos que solo verás cuando te coloques las gafas desde tu sofá real pero que en el mundo del metaverso te permitirían ser vecino de Will Smith, por ejemplo.
La fantasía de comprar y vivir en el Metaverso
Y si eres vecino de Hollywood Bulevard podrás comprar -virtualmente- el último Birkin diseñado para la ocasión con inteligencia artificial y solo para lucir en el Metaverso, porque será virtual. Tu avatar, una especie de foto tuya animada por ti paseará con el bolso ficticio que te ha costado una pasta.
Pero ¡qué más da! ¿Acaso no hay ya juegos de aplicaciones en las que vas comprando objetos por ejemplo para tu granja virtual? Pues el Metaverso debe ser algo parecido pero con cosas caras o no tan caras… pero de mentira.
El negocio del Metaverso
El objetivo, si se lleva al extremo, es como una peli de terror de una ingeniería social tremenda: Dejar de consumir en la vida real para consumir en la virtual.
Dicen algunos que incluso iremos a la oficina virtual sin salir de casa, porque cuando nos coloquemos las gafas, nuestro avatar irá a una oficina del ciberespacio en la que trabajaremos y nos pagarán vete tú a saber cómo. Lo que empezó siendo un juego puede terminar en una pesadilla.
Pero no adelantemos acontecimientos, porque afortunadamente aún tenemos neuronas libres capaces de impedir que nuestras vidas sean un capítulo de Los Juegos del Hambre.
Los NFT, la última moda
Ahora lo que está de moda es comprar para «crecer» en el Metaverso. Invertir, dicen. Y a esta moda de los NFT´s se suma Hermès. Y no me extraña.
Dolce & Gabbana, Etro, Tommy Hilfiger, Estée Lauder y Elie Saab son algunas de las marcas que venden super moda solo para el universo A. Según los datos de Dune Analytics, otras como Nike, Gucci, adidas o Tiffany ya acumulan un valor combinado de 260.000 millones de dólares en ventas de NFT.
Nike is approaching $200M in sales generated from NFTs, towering over the other mega-brands who are actively participating in the space.
Dolce & Gabbana ($25.65 million) took second, and Tiffany ($12.62 million) finished third.
Data compiled by @nlevine19 via Dune Analytics. pic.twitter.com/xhGWaxlJ2P
— The Metaverse (@themetav3rse) August 24, 2022
El salto virtual de las grandes marcas
Dune Analytics es una plataforma de datos que los analistas e inversores de criptoactivos utilizan para investigar proyectos específicos como NFT, plataformas DeFi o ecosistemas de cadena de bloques. Cualquiera puede consultar los datos y crear visualizaciones usando Dune.
Según la empresa, Nike ha generado 67.400 transacciones en el mercado secundario y un volumen de 1.290 millones de dólares. Mientras, adidas ha generado 51.500 transacciones comparables y un volumen significativamente menor de 175,7 millones de dólares.
Hermès se pasa al Metaverso
Hermès ha presentado, según diferentes informaciones, una solicitud de marca que abarca NFTs, criptomonedas y su propio metaverso. A partir de la presentación que se realizó ante la Oficina de Patentes y Marcas de los Estados Unidos (USPTO), la marca tiene un software descargable para ver, almacenar y gestionar bienes virtuales, coleccionables digitales, criptomonedas y NFT «para su uso en mundos online».