(Foto: Classic Car Auctions)
El coleccionista Ad Palmen atesoró durante 40 años una extensa colección de coches clásicos que mantuvo casi en el más estricto secreto. Pocas personas ajenas a su entorno personal sabían que tras las puertas de varias instalaciones, este holandés escondía un nutrido número de joyas de cuatro ruedas. El año pasado, cuando cumplió 82 años, fue diagnosticado de demencia. El dueño tuvo que afrontar entonces la venta de los 230 coches clásicos de su selecta colección que ahora sale a subasta.
Su gusto por los coches clásicos comenzó a mediados de siglo pasado, cuando trabajaba como distribuidor de automóviles en los Países Bajos. El primer coche que adquirió para su colección fue un Lancia B20 de color amarillo al que seguirían otro par de cientos.
Con unos 230 ejemplares, se estima que la suya es una de las colecciones secretas de coches clásicos más importantes de Europa con modelos de todo el mundo.
Así, marcas italianas como Alfa Romeo, Lancia, Maserati y Ferrari, conviven con otras francesas como Facel Vega o alemanas como BMW, Mercedes-Benz y NSU. Tampoco faltan otras conocidas del Reino Unido como Jaguar, Aston Martin y Rolls-Royce o de Estados Unidos como Chevrolet, Cadillac y Ford.
Y hay más, porque la colección también incluye coches de marcas menos conocidas como Tatra, Monica, Moretti, Matra, Alvis, Imperia y Villard.
Sin duda un tesoro para coleccionistas y amantes del motor que este hombre almacenó durante décadas lejos de miradas indiscretas. Los guardaba en dos almacenes y una antigua iglesia que muchos curiosos quisieron visitar durante años sin éxito.
Y es que al parecer su dueño era muy celoso de su colección, que disfrutaba y cuidaba de cerca y a su manera, ya que vivió, de forma bastante modesta y austera, en uno de los amplios garajes donde guardaba parte de los coches.
Ahora este tesoro será subastado entre mayo y junio por Gallery Aaldering junto a Classic Car Auctions. Los compradores de esta colección secreta de coches clásicos asistieron asombrados al descubrimiento de la misma viendo vehículos ciertamente descuidados y afectados por el paso del tiempo, pero con un gran número de piezas intactas.
Entre todos ellos hay tres que destacan sobre los demás. Son un Lancia Aurelia Spider, un Alfa Romeo 2600 SZ y un Mercedes-Benz 300S Roadster. Los vendedores no han estimado a nivel global ni individual una cantidad para subasta, pero podría alcanzar varios millones de dólares.
Sólo el citado modelo de Mercedes-Benz podría rondar el medio millón de dólares. El año pasado Bonhams subastó un Roadster sin restaurar similar por algo más de 472.000 dólares así que… hagan sus apuestas.
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