La venta de viviendas de lujo se dispara un 55 %

La venta de viviendas de lujo es un mercado en clara expansión. Así lo avalan los datos ofrecidos por la red inmobiliaria The Simple Rent. Asegura que la venta de inmuebles de más de dos millones de euros creció un 55 % en España en 2022 respecto al año anterior. Alcanza más de 8.000 viviendas vendidas, mientras que en los seis primeros meses de 2023 se realizaron 5.500 ventas.

De hecho, la alta demanda de este tipo de viviendas ha provocado un aumento del precio de las mismas un 13 %. Una tendencia que se mantendrá dado que es un mercado que seguirá al alza.

Las viviendas de lujo en España tiene gran atractivo

Málaga sigue liderando un año más el número de operaciones de viviendas de lujo valoradas por encima del millón de euros. Le siguen Baleares, Madrid y Barcelona que acaparan el 69 % de las viviendas de lujo vendidas en España en el último año.

Pero, ¿cuál es el perfil de este tipo de compradores? El estudio señala dos fundamentales, un perfil de comprador internacional encabezados por los británicos, alemanes y franceses y un perfil inversor. Respecto al primero, corresponde a un ejecutivo de más de 40 años con familia, un tipo de comprador que tiene un alto poder adquisitivo. Buscan viviendas de lujo con características exclusivas y sofisticadas.

El perfil inversor gana terreno

En cuanto al segundo perfil, el perfil inversor, de nuevo vuelve a ser un perfil de origen extranjero que ve en este tipo de operaciones un valor seguro. Busca invertir en viviendas de lujo como una forma de preservar y aumentar su capital a largo plazo.

De hecho, desde la red inmobiliaria han señalado que los inversores extranjeros ven en España uno de los mejores lugares para invertir en el sector inmobiliario de lujo. El país es conocido por sus propiedades de lujo, especialmente en destinos como Barcelona, Marbella, Ibiza y Mallorca.

El valor refugio de la inversión en viviendas de lujo es muy atractivo

Además, consideran este tipo de propiedades como un “valor refugio” debido a su estabilidad y potencial de apreciación ya que en España este tipo de viviendas se sigue revalorizando por encima de la media del mercado inmobiliario.

Pero si algo tienen en común estos dos perfiles es que ambos exigen la máxima privacidad en las propiedades. Apuestan por viviendas con amplias parcelas y con medidas de seguridad avanzadas. Entre ellos sistemas de vigilancia y acceso controlado, donde se destaca también una marcada preferencia por viviendas en comunidades cerradas o con propiedades adyacentes que garanticen la tranquilidad.