¿En serio? ¿Este tipo de turismo convence a las celebrities?

Las Healthy Hollidays están de moda. En vacaciones buscamos no sólo el relax sino el modo de reponer fuerzas, recargar el cuerpo y sentir que la energía/vitalidad fluye. Las vacaciones conscientes son un modo de hacer reset en mente/cuerpo y disponerse al descanso desde el cuidado integral de la salud. Entre las distintas opciones hay una que comienza a hacerse un hueco en medio de la sociedad de la abundancia y la acumulación, el ayuno, consistente en pasar unos días a base de zumos para limpiar el cuerpo de toxinas.

La misma Beyoncé, de gira por España estos días, junto a Uma Thurman, Sean Connery o Katie Pearce practican ayuno desde hace años. El turismo del ayuno llega despacio pero con fuerza a nuestro país, buscando lugares de mar o montaña donde vivir la experiencia en un entorno privilegiado. La ciencia antiaging lleva más décadas investigando los beneficios del ayuno, llegando a la conclusión que la restricción calórica por un tiempo determinado no sólo ayuda a limpiar el organismo sino que, cuentan, frena el envejecimiento.

La revista científica American Journal of Clinical Nutrition describe ampliamente los beneficios de la práctica y recuerda que no es contemporánea sino milenaria. El filósofo griego Plutarco ya decía: «En lugar de usar medicina, ayuna por un día”. El psicoinmunólogo y especialista en ayuno, Edgar Barrionuevo, realiza en su Clínica Pure Corpore en Castelldefels terapias de ayuno y comprueba diariamente los beneficios no sólo físicos, sino de ánimo de las personas que deciden realizar esta práctica.

El concepto es algo completamente opuesto al de nuestra sociedad construida donde el más tiene más poder que el menos. Comer más veces al día, cantidades en abundancia. Pero, tal y como dice el proverbio naturista:“Descomer es tan importante como el comer” y cada vez son más los que se deciden a ponerlo en práctica y apuntarse a lugares como la Buchinger, el Sha Wellnes o Pure Corpore, donde profesionales puedan guiar el camino al ayuno de forma controlada.

El japonés Nagumo Yoshinori ,autor del bestseller ‘Un día, una comida’, no sólo cuenta los beneficios del ayuno intermitente sino que tiene sorprendido al mundo con su apariencia de veinticinco cuando sobrepasa los sesenta: “Todos los animales luchan cuando tienen hambre. Si el hambre no generase más vitalidad, no podríamos sobrevivir”. Lo preventivo comienza a calar en muchos que desean aplicar la antigua máxima de más vale prevenir que curar.

En un mundo donde mueren más personas por obesidad que por desnutrición, es evidente que queda mucho por recorrer. El ayuno cuenta cada vez con más adeptos, pero no es cosa de una semana. La práctica de unos días logra cambiar tus hábitos alimentarios; descartar los alimentos procesados y buscar los alimentos de la tierra; huyendo del azúcar. Ayunar, más que una nueva moda es una práctica recuperada. Parar la máquina y limpiarla por dentro para ponerla en funcionamiento con más energía. Así se cuentan las vacaciones conscientes de quienes el disfrute también pasa por cuidarse en salud.