Los tintes sin amoniaco que huelen bien
La firma Revlon Professional lanza un servicio personalizado para disfrutar de la coloración sin amoniaco.
El tedioso momento del tinte se convierte ahora en una experiencia mucho más agradable y con posibilidad de evasión. Sucede gracias a la marca Revlon Professional (la destinada a los profesionales de la peluquería), que permite elegir entre tres fragancias distintas para disfrutar del momento. Cuando vayamos a la peluquería, según nuestro estado de ánimo, las mujeres podremos decidir si durante los 40 minutos que tenemos que llevar el tinte en el cabello queremos oler a cítrico, a dulce o a fruta. Esto es posible gracias a su nueva línea Color Sublime y sus tres fragancias (también podemos elegir que nuestra cabellera no desprenda olor alguno):
- Zen Moment con notas de naranja, limón, romero, clavo, mandarina, lirio, fresa y madera.
- Sunset Mood tiene melocotón, albaricoque, rosa, naranja y mandarina.
- Sweet Gourmet cuenta con lirio, jazmín, chocolate, manteca de cacao y vainilla.
El almizcle es común en las tres opciones. Yo elegí la primera y aseguro que el olor, envolvente pero que no satura, logró relajarme. Algo que no consigo cuando tengo que estar casi una hora con el ungüento en la cabeza.
Solo 1 de cada 10 mujeres no se tiñen el cabello en España. Muchas de ellas lo hacen únicamente para no ver las dichosas canas (que en Francia por ejemplo se lucen sin complejos). Pues bien, este nuevo servicio de coloración tiñe completamente los cabellos blancos, algo que puede sonar a perogrullada pero que hasta ahora no era posible con los productos sin amoniaco. Además, en el lavado, el color que llega a la piel de la cara se limpia sin problema. No hay que utilizar ningún alcohol para repasar el óvalo.
A los profesionales que lo han probado les ha fascinado. Pablo Pérez, propietario del salón premium Hair&More ubicado en la sexta planta de El Corte Inglés de Sanchinarro en Madrid, destaca que con color Sublime «el cabello queda muy suave (con algunos tintes ya sabemos que las puntas quedan un poco «estropajo» al cabo de unos días de teñirse) y con más brillo». «No queda dañado y seco como ocurre con otros productos del mercado gracias a su base de aceite de rosa mosqueta y extracto de algodón«, me explica el estilista con el fondo de unas excelentes vistas a las montañas de la sierra de Madrid.
El centro, de 300 metros cuadrados, no me dejó indiferente. La zona femenina está separada de la masculina con decoraciones muy diferenciadas. La parte dedicada a los hombres en tonos verdes tiene una estética inglesa con papel de tartán en la pared y con servicio de barbería, por supuesto. Sus atenciones las conocen personajes como Melendi o Varane.
En cuanto a la zona de aguas, los lavacabezas de las mujeres están separados con paneles. Además, Hair & More tiene una cabina VIP donde el servicio se incrementa un 25% por tener máxima discreción. Esta es una zona muy utilizada por empleadas de embajadas (Arabia Saudí, Qatar…) que no desean ser vistas. Toda una experiencia de lujo de la que además sales perfecta.