Historia del Trooping the Colour, el evento que este año celebrará Carlos III como rey
El desfile militar se realiza en junio en honor al cumpleaños del monarca y será el primero que presida Carlos III.
Carlos III se volverá a dar un baño de masas el próximo sábado al presidir el tradicional desfile Trooping the Colour. Será el primero al que acuda como monarca, ya que desde niño ha estado en todos ellos acompañando primero a su abuelo, Jorge VI y luego a su madre, Isabel II. Un evento con mucha tradición del que hoy desvelamos sus curiosidades y su historia.
La historia del tradicional Trooping the Colour
El desfile se realiza en junio en honor al cumpleaños del rey, independientemente de la fecha en la que se celebre la onomástica. En este caso, aún habrá que esperar hasta el 14 noviembre para que Carlos III cumpla 75 años.
Instaurada como una tradición desde el reinado de Carlos II, entre 1660 y 1685, el Trooping the Colour no deja de ser un desfile militar en el que los regimientos presentan sus banderas, sus colores.
No fue hasta el reinado de Jorge II, en 1748, cuando el desfile comenzó a ligarse al cumpleaños del rey y a realizarse en una fecha más cercana al verano. Algo que facilitaba que los ciudadanos acudieran a presenciarlo y que los militares lucieran sus mejores galas. Su nieto, Jorge III, ordenó en 1760 que el desfile tuviera un carácter anual.
Carlos III disfrutará de su primer Trooping the Colour como rey
El próximo sábado está previsto que 1.500 soldados, 300 caballos y 400 músicos participen en un evento que llevan semanas ensayando. Como suele ser habitual, los miembros más relevantes de la familia real viajarán en carruajes tirados por caballos desde el Palacio de Buckingham a través de The Mall.
El trayecto termina a una milla de distancia, en St. James’ Park, donde tiene lugar la parada militar y donde Carlos III pasará revista a las tropas. No se descarta que, como sucedió el año pasado, el príncipe William y la princesa Ana participen en el desfile por su rango militar.
Una vez concluido el evento, toda la familia regresará hasta el Palacio de Buckingham. Allí, como hace unas semanas durante la coronación del rey, volverán a salir al balcón para saludar a los ciudadanos. Una salva de 41 cañonazos y el veloz paso de un varias aeronaves de la fuerza aérea pondrán fin al evento.