Foto: Gtres
El último libro sobre la familia real británica firmado por Omid Scobie está levantando verdaderas ampollas. Uno de los motivos principales es que revela los nombres de las personas que en su día hicieron comentarios racistas sobre el que sería el primer hijo del príncipe Harry y Meghan Markle. Se habló entonces de que pudo haber sido la princesa Ana y ahora la publicación (por un error de traducción en su versión para los Países Bajos) ha revelado que no, que fueron Carlos III y Kate Middleton quienes hicieron los desacertados comentarios sobre el color de la piel del futuro bebé.
Sea como fuere, la opinión pública se ha volcado sobre la princesa de Gales que, en medio de la vorágine, ayer acudió a un acto junto a su marido y los príncipes de Suecia en la Royal Variety de Londres. Una cita para la que escogió un vestido muy elegante con el que podría pedir perdón, de una forma silenciosa, a su cuñada.
Y es que Kate Middleton lució ayer y por primera vez un diseño de Safiyaa, una marca que Meghan Markle lució en dos momentos clave de su etapa en Londres.
El primero fue durante un viaje oficial junto a su marido por Oceanía. De allí son las primeras fotografías en las que lució públicamente su tripa de embarazada. El vestido de la firma británica que llevó allí fue un diseño largo, azul brillante con manga corta y capa que le vimos en las Islas Fiyi.
El segundo momento importante en el que recurrió a Safiyaa fue, ni más ni menos el último acto oficial como miembro activo de la Familia Real Británica. Fue el 7 de marzo de 2020 en el Mountbatten Festival of Music de Londres. Allí acudió vestida de rojo, con un diseño muy similar al anterior, también largo y con capa superpuesta.
No sabemos si Kate Middleton le ha pedido perdón a Meghan Markle por teléfono después del revuelo del libro. Quizás la duquesa de Sussex no esté muy receptiva después de estos cuatro años sin hablarse con su cuñada; y ésta haya preferido rendirle homenaje a través de la ropa.
En cualquier caso el diseño que eligió ayer era espectacular. Largo hasta los pies, de un favorecedor color verde azulado, el diseño tiene el cuerpo recto y el cuello redondo con bordado de cristales. El detalle más llamativo son las mangas, del mismo largo del vestido y abiertas a la altura del codo.
Kate Middleton lo combinó con acierto con unos salones a juego de su firma favorita, Gianvito Rossi; una cartera de mano de otra de sus firmas de confianza, Jenny Packham. En cuanto a las joyas eligió unos pendientes de JCrew a juego con el cuello del vestido y un llamativo brazalete.
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