Meghan Markle ha vuelto a la esfera mediática demostrando que su estilo personal y elegancia permanecen intactos. La duquesa de Sussex viajaba al lado del príncipe Harry a Holanda para inaugurar los Juegos Invictus, y lo hacía enseñándonos el nuevo armario y las joyas que ha adquirido en estos dos últimos años.
Y es que precisamente sus joyas han acaparado todos los flashes. Gargantillas de Cartier, pendientes de diamantes o collares de rubíes son solo una pequeña muestra de las piezas con las que Meghan Markle ha brillado en Holanda.
Vestida de blanco y con una enorme sonrisa llegaba Meghan Markle a los actos organizados para los Juegos Invictus. La duquesa de Sussex brillaba con luz propia cogida del brazo del príncipe Harry, luciendo un traje blanco de Valentino, que resaltaba su piel morena y las joyas doradas que adornaban su cuello, muñecas y dedos.
Para su primera aparición, Meghan Markle rescataba dos joyas que tienen un especial significado para ella. Por un lado los pendientes de diamantes de Carter que lució el día de su boda; un modelo de estilo botón que apenas se percibían tras su larga y ondulada melena suelta. Y, por el otro lado, el reloj Tank, también de Cartier, que perteneció a Diana de Gales.
Junto a estas dos especiales y valiosísimas joyas la duquesa de Sussex lució un colgante con forma redonda de Sophie Lis con diamantes y rubíes inspirado en un extracto del poema de la escritora francesa Rosemonde Gerard, La canción eterna. Un colgante de la nueva colección de la firma y que cuesta 340 euros.
Y para rematar el look, en la muñeca lucía una fina pulsera de oro con cadena atada al dedo de la firma Catbird, cuyo precio es de 287 euros.
Sin embargo, y a pesar del despliegue de joyas que Meghan lució el primer día, fue en la ceremonia de apertura de los Juegos Invictus donde llevó la pieza más valiosa de todas. La duquesa de Sussex se subía al escenario para presentar a su marido luciendo la gargantilla Juste Un Clou de Cartier, una exclusiva y valiosa pieza de oro amarillo y diamantes que está disponible en la web de la firma por 15.000 euros.
Esta joya la combinó con unos pendientes de diamantes de estilo botón de Lorraine Schwartzman y unas pulseras y brazaletes a juego.
Al día siguiente Meghan Markle optaba por un look más informal. Estaba protagonizado por una elegante chaqueta negra con detalles dorados de Celine, que combinó con vaqueros, manoletinas Chanel y gafas de sol estilo aviador. Un estilo más casual al que también le añadió joyas especiales.
Para sus orejas se decantó por unos mini pendientes de estrellas de la firma de su amiga, la tenista Serena Williams. Se trata del modelo Diamond Starburst y que ya no está disponible en la web. Lo combinó con una cadena dorada a juego con las pulseras, y el anillo Duet Pinky Ring de oro diamantes. Una pieza de la firma Shiffon, y cuyo precio es de 551 euros.
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