Apenas unas horas después del estreno de la segunda parte del documental de Harry y Meghan, la familia real británica al completo reaparecía para apoyar a Kate Middleton en el concierto de Navidad que cada año organiza en la abadía de Westminster.
Las acusaciones que los duques de Sussex han lanzado hacia la institución y directamente hacia el rey Carlos III y el príncipe William han pasado desapercibidas. O al menos eso es lo que ellos han tratado de demostrar en esta importante cita. Muy sonrientes y mostrando una aparente normalidad, la familia real ha disfrutado del concierto en el que se ha rendido un especial homenaje a Isabel II.
Los príncipes de Gales llegaban a la abadía de Westminster mostrando su mejor cara y muy unidos con sus hijos, los príncipes George y Charlotte. Una imagen de familia perfecta y muy bien conjuntada en tonos azul marino y burdeos.
Kate Middleton volvía a sus incondicionales abrigo/vestidos con un diseño de Eponine London. Una prenda con escote cruzado en pico, ajustado al cuerpo y largo por debajo de la rodilla, con dos botones en la cintura.
Completó el look con unos salones de Gianvito Rossi del mismo color, al igual que el clutch, de piel efecto cocodrilo y guantes. Como joyas apostó por unos elegantes pendientes largos con pequeños rubies de Accessorize.
Del mismo color y siguiendo el ejemplo de los abrigo/vestido de su madre, la princesa Charlotte lució un bonito chaquetón de doble botonadura con cuello de terciopelo de la marca infantil Trotters. La misma marca de las manoletinas negras de charol con las que completó el look.
Por su parte, los príncipes William y George lucieron el protocolario traje con corbata, la cual el príncipe de Gales tiñó de color burdeos para lucir a conjunto con Kate Middleton y Charlotte.
Y es que el burdeos fue, sin duda, el color de la noche. Zara Tindall lo escogió para su abrigo cruzado de Karen Millen, una firma que también vistió de ese color a Pippa Middleton con un elegante chaquetón de doble botonadura y cinturón.
Tampoco quisieron perderse el concierto la condesa de Wessex, que se decantó por el color banco para su total look con abrigo de Max Mara; y las princesas Beatriz y Eugenia de York, que dieron el toque de color con sus atuendos, al decantarse por dos chaquetones con estampado de cuadros.
Por supuesto, los actuales reyes también asistieron al evento, donde se rindió un homenaje a Isabel II, pues se trata de las primeras Navidades sin la monarca. Ellos fueron los últimos en llegar y se llevaron todos los flashes, en especial por el vestido de estampado leopardo que se podía intuir bajo el abrigo de Camilla.
Una imagen de unión y apoyo a la princesa de Gales, que llega en el momento justo y tras conocer las nuevas acusaciones y críticas del príncipe Harry hacia su familia.
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