Si tuviéramos que resumir en una palabra cómo han sido los looks de la reina Letizia el pasado 2020, sin duda escogeríamos austeridad. Y es que en un año marcado por el coronavirus y la crisis sanitaria, la reina optó por dejar la tarjeta de crédito en el bolso y rescatar de su armario algunos de sus trajes más aplaudidos y favoritos. Una tendencia, la de reciclar vestidos, que la ha convertido en una de las roylas europeas que menos dinero han gastado en ropa en 2020.
La web especializada en moda de la realeza Ufo no more ha destacado a la reina Letizia como la segunda monarca que menos ha invertido en ropa en el último año. En concreto, señalan que la esposa de Felipe VI solo estrenó 97 prendas a lo largo de 2020 en las que se gastó un total de 15.892 euros. Una cantidad alta para muchos de nosotros que sin embargo supone menos de la mitad del dinero que invirtió en moda el 2019, cuando se gastó 42.448 euros.
Esta nueva tendencia a reciclar ropa fue más que evidente en la segunda mitad de 2020. Ya en su gira por España pudimos tener un adelanto de lo que iban a ser los looks de la reina en los próximos meses. Durante sus viajes, Letizia combinó con gran tino prendas que ya había lucido en alguna ocasión, con otras nuevas que, además, eran de tiendas asequibles como Zara, Mango o Massimo Dutti.
Pero, sin duda, lo más destacado fue que Letizia no estrenó traje en los grandes acontecimientos del año: los Premios Princesa de Asturias y el Día de la Fiesta Nacional. Eventos para los que optó por reciclar trajes de su fiel Felipe Varela y Delpozo, que ya había lucido en otras ocasiones.
En el lado opuesto a Letizia encontramos a Charlène de Mónaco, que se ha alzado con el título de la royal que más dinero ha gastado en ropa en 2020. Hablamos de un total de 106.238 euros. Lo más llamativo es que la mujer del príncipe Alberto solo estrenó 74 piezas, 23 menos que la reina Letizia, lo que supone un gasto de 2.083 euros por traje.
No es de extrañar que la royal monaguesca haya gastado más de 100.000 euros en ropa. Y es que es de sobra conocida la afición de Charlène por las grandes firmas de lujo como Armani u Oscar de la Renta. Algo en lo que difiere de nuestra reina, que opta por diseñadores españoles como Adolfo Domínguez, Pedro del Hierro y Roberto Verino, la clásica Carolina Herrera, y otras firmas asequibles como Zara, Mango, Massimo Dutti o Uterqüe.
Detrás de Charlène nos encontramos a Kate Middleton que ha invertido un total de 86.800 euros en ropa en 2020. Muy de cerca le sigue su cuñada Meghan Markle, que a pesar de haber dejado apartadas sus funciones como duquesa de Sussex y marcharse a Estados Unidos, ha gastado 50.053 euros en renovar su armario.
En el ranking también nos encontramos a Máxima de Holanda, con 49.008 euros, Mary de Dinamarca, con 34.437 euros, y Sofía de Suecia, que se gastó 27.281 euros. En séptimo lugar, a un puesto de Letizia, está Victoria de Suecia que gastó en ropa 21.296 euros. Y, por último, la royal más austera de Europa, Mette-Marit de Noruega, quien invirtió 11.287 euros en sus looks de 2020.
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