La familia real británica ha visto en el cambio climático un tema fantástico por el que luchar. El príncipe William celebraba anoche la primera gala de los Earthshot Prize que él mismo se ha encargado de poner en marcha a través de la Royal Foundation. Un acto al que asistió con su mujer, Kate Middleton. Los dos desfilaron sobre la alfombra verde escogida para dar la bienvenida a un nutrido grupo de invitados. Actores, músicos, deportistas e incluso diseñadores de moda se mezclaron en un evento creado para concienciar sobre el momento crítico que vive el planeta.
«Es el momento más trascendental en la historia de la humanidad» sentenció el Duque de Cambridge, que obvió el habitual traje o esmoquin que suele lucir en este tipo de actos. Por contra, escogió un atuendo de lo más 007, con un fino jersey de punto con medio cuello y una chaqueta de terciopelo verde. Muchos han buscado similitud con el esmoquin de terciopelo rosa que Daniel Craig usó en el estreno de No Time to Die en Londres a principios de este mes.
Un atuendo con doble intención probablemente. Porque los organizadores de la gala pidieron expresamente que los invitados tuvieran especial cuidado con la ropa escogida para asistir. Recomendaban prendas ya utilizadas o que fueran de producción sostenible. Al igual que les sugirieron que cuidaran el medio ambiente al escoger el medio de transporte para asistir al acto. Ninguna de las estrellas usó el avión para asistir a la gala, por ejemplo.
El príncipe William sacó del armario un look que estrenó hace dos años y Kate Middleton hizo lo propio con un vestido de Alexander McQueen. Un diseño valorado en algo más de 4.000 libras que usó por primera vez hace diez años, en una recepción de los Bafta en Los Ángeles. La Duquesa de Cambridge brilló especialmente durante la noche y acaparó buena parte de la atención de los fotógrafos.
Sólo fue eclipsada por la actriz Emma Watson que volvió a brillar al escoger un vestido de tul con abertura en la espalda. Una creación reciclada con otros 10 vestidos para la organización benéfica Oxfam.
El premio, dotado con un millón de libras para cada uno de los cinco galardonados en distintas categorías, será entregado el año que viene en Estados Unidos. Un anunció realizado por el propio príncipe William que sorprendió gratamente a los invitados, entre ellos el futbolista del Liverpool, Mo Salah y el cantante Ed Sheeran. Un guiño además para su hermano, el príncipe Harry, que veremos si se une a esta causa junto a su esposa Meghan Markle en tierras americanas, donde defienden otros debates, como la salud mental.
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