El arriesgado reto de Máxima de Holanda con el que la reina Letizia jamás se atreverá
Máxima de Holanda visita la Escuela Militar de Breda y se atreve a saltar en paracaídas acompañada de un instructor.
Máxima de Holanda ha demostrado que no le tiene miedo a nada. La monarca ha dejado a todos con la boca abierta en su última visita a la Escuela de Defensa de Breda. Allí ha conversado animadamente con los militares y ha cambiado su elegante traje, por un uniforme con el que nos gustaría ver a la reina Letizia. Y es que ni corta ni perezosa, Máxima de Holanda ha querido conocer de primera mano el trabajo de los militares y ha saltado en paracaídas.
La monarca se mete en la piel de los militares
Vestida con una elegante blusa de color morado de la firma Natan, combinada con unos pantalones beige y unos salones del mismo color, llegaba Máxima de Holanda a la Escuela de Defensa de Breda. Sin embargo, muy poco le duró este elegante atuendo, pues lo cambió por un mono negro y unos arneses.
Y es que la esposa del príncipe Guillermo sorprendía a todos aceptando el reto de saltar en paracaídas, una actividad que los militares desarrollan cada día en su trabajo y por la que Máxima se ha interesado. «No tengo idea de en lo que me estoy metiendo», afirmaba tras aceptar el reto del salto.
Máxima de Holanda saltó en paracaídas
Muy segura de sí misma, con una gran sonrisa y el pelo recogido en una coleta, la reina escuchaba atenta las indicaciones de los militares minutos antes de montarse en la avioneta. Desde ésta ha saltado en tándem junto a un instructor llamado Mark, regalando unas imágenes que ya forman parte de la historia de la monarquía holandesa.
Tras disfrutar de un tranquilo descenso, Máxima de Holanda pisaba tierra firme y caía boca arriba sobre el suelo. Allí dos militares la ayudaron a levantarse y muy contenta y emocionaba atendía a los medios de comunicación que habían seguido su aventura.
Derrochando y simpatía y sentido del humor confesaba que había sentido miedo y que incluso había tenido que decirse a sí misma «sigue respirando«. «Me parece muy emocionante. Por supuesto hago esto para apoyar a los hombres y mujeres de la defensa y experimentar lo que están pasando», ha contado.