Mar España Martí: «No es posible abarcar plenamente maternidad y trabajo»
Mar España Martí es la Directora de la Agencia española de Protección de Datos (AEDP). La mayor de cuatro hermanos, dice que en su infancia disfrutó del colegio y tuvo la suerte de contar con una red familiar de apoyo estupenda. Define a su madre como «una persona independiente y de firmes valores» y su padre, abogado y periodista, le transmitió «el amor por la vida y su integridad».
TL: ¿Por qué estudiaste derecho?
Mar España Martí: La decisión tuvo una parte de improvisación, porque mi idea inicial fue estudiar Filosofía pura, que me apasionaba. Recuerdo que mi padre me preguntó si pensaba pasarme toda la vida dando clase, porque sabía lo activa que soy y eso me hizo plantearme estudiar Derecho.
TL: ¿Cuál fue tu primer trabajo?
Mar España Martí: De asesora del Delegado Provincial de Educación en Cantabria. Fue mi impulso para la independencia, algo que me apetecía mucho. Disfruté mucho de ese primer año donde todo era nuevo.
«Creo en un modelo de trabajo con energía masculina y femenina en igualdad»
TL: ¿Cuál era tu aspiración?
MEM: En ese momento no la tenía clara, es algo que se ha ido gestando a lo largo de mi experiencia profesional y sobre todo vital. Sí tenía claro las áreas que más me gustaban, las sociales.
TL: ¿Ser mujer te ha condicionado?
MEM: Claro que me ha condicionado, aunque la sociedad ha mejorado mucho en estas décadas. Hace más de 30 años en la Administración, la responsabilidad y el poder recaían principalmente en manos masculinas. Además, se nos juzgaba con más dureza y a veces por aspectos externos. Creo en un modelo de trabajo donde la energía masculina y femenina estén igualmente representadas y todas las personas se sientan integradas y escuchadas.
TL: ¿Cómo has compatibilizado la maternidad y el trabajo?
MEM: Tener puestos de responsabilidad ha tenido repercusión en mis hijos. No es posible abarcar plenamente todas las facetas y la conciliación no siempre puede darse sin que haya costes. Cuando echo la vista atrás, espero que mis dos hijos puedan comprender y aceptar que no ha sido fácil.
«Espero que mis hijos comprendan que mi conciliación no fue fácil»
TL: Háblanos, pues, de tu trayectoria laboral.
MEM: Volví a servicios centrales del Ministerio, como Consejera Técnica en la Dirección General de Coordinación y la Alta Inspección, donde llevábamos la relación con las Comunidades Autónomas. A los tres años, me surgió la oportunidad de trabajar como Secretaria General en el Instituto de la Mujer, donde se sembró la semilla para favorecer la igualdad y apoyar a las mujeres.
Cuando el Ministerio de Asuntos Sociales se fusionó con el de Trabajo, me propusieron formar parte del Gabinete del Ministro como asesora de política social. Me apasionó la creatividad de esa etapa y poder conocer a las entidades del tercer sector y las necesidades sociales de nuestro país. No obstante fue una etapa dura, pues mi hijo mayor tenía 16 meses y me incorporé embarazada de 7 meses del segundo.
«Tras ser madre tuve que priorizar trabajo o familia»
TL: ¿Un momento difícil en el que tuviste que priorizar?
MEM: Sí. Tras año y medio, sentí que tenía que tomar una decisión y decidí priorizar mi familia. Nos fuimos a vivir a Sevilla, a una vida más tranquila, donde estuve año y medio como Directora del Área de Educación y la Alta Inspección y después como Consejera del Consejo de Administración de Canal Sur.
Con el tiempo me incorporé como Secretaria General del Defensor del Pueblo. Estuve en el cargo 8 años y pude conocer de primera mano la importancia y cómo garantizar los derechos humanos en el funcionamiento de las Administraciones Públicas.
Tras pasar un año como Asesora de la Delegación del Gobierno, asumí la Secretaría General de la Consejería de Presidencia en Castilla la Mancha. Después fui Viceconsejera, coordinando como secretaria adjunta el Consejo de Gobierno y el impulso de la administración electrónica. Por último, asumí la dirección de la AEPD en el año 2015.
«Nunca ha sido tan necesario preservar la privacidad»
TL: ¿Cuánto ha crecido la exigencia de preservar la privacidad con Internet, las redes sociales y ahora con la inteligencia artificial?
MEM: La necesidad de preservar la privacidad y concienciar a ciudadanos y responsables de este derecho fundamental, ha sido exponencial con el uso de la IA. Nunca en la historia de la humanidad se han tratado tal volumen de datos que puede permitir saber todo de nosotros e influir en muchos aspectos de nuestra vida.
TL: ¿En qué estás trabajando para afrontar este importante reto?
MEM: Tenemos múltiples iniciativas a través de nuestro Marco de Responsabilidad Social. Priorizamos la protección a las personas cuando hay una difusión viral de datos sensibles a través del canal prioritario.
TL: Sé que eres una persona muy inquieta y que amas la filosofía y la psicología. ¿Cuánto te han ayudado en tu vida personal y profesional?
MEM: En paralelo, llevo años formándome en psicología y practicando yoga y meditación. He intentado incorporar en mi trabajo el bienestar organizacional, introduciendo clases de yoga, mindfulness y meditación para disminuir el estrés.
«Me apasiona explorar la salud desde el conocimiento»
TL: Dentro de tu actual experiencia, has desarrollado mucho interés para la salud mental de la infancia. ¿En qué término estas afrontando la cuestión, tienes una iniciativa propia?
MEM: Me apasiona explorar la salud desde el comienzo, desde los primeros mil días de vida. De hecho he fundado una ONG, Fundevas, dedicada al desarrollo del vínculo y el apego seguro. Sobre todo para apoyar a familias y gobiernos en el impulso de medidas en esta etapa clave en términos de salud pública.
TL: ¿Qué esperas de tu futuro?
MEM: Espero poder culminar este tiempo en la Agencia, irme a vivir en contacto con la naturaleza y poder dedicarme más a Fundevas y a profundizar en la práctica de yoga, disfrutando de mis seres queridos.