Según expertos reales, el desastre del Megxit de la familia real británica es, en gran parte, culpa del príncipe Harry por no haber sabido preparar adecuadamente a su esposa, Meghan Markle, para la vida como parte de la familia real. «Es una combinación de la culpa de ambos, pero principalmente de Harry, por no explicárselo correctamente» , dijo al portal Page Six Robert Jobson. El autor de Prince Philip’s Century sigue asegurando que «no es el tipo más astuto, pero tal vez él no quiso explicarlo, porque es un trabajo muy duro ser miembro de la familia real. La gente piensa que no lo es, pero lo es. No es sólo glamouroso, y tal vez eso no le gustó después de todo».
Jobson no eximió por completo de culpa a la duquesa de Sussex porque la pareja no lograra integrarse al llegar a la casa real. Según él, ella podría haber mostrado algo más que curiosidad para saber dónde se estaba metiendo. Jobson señaló que Markle tenía pocas excusas para no saber cómo funcionaban las cosas, ya que el Palacio le asignó a Samantha Cohen, miembro del equipo personal de la Reina, para que la ayudara a aprender los entresijos de ser duquesa. «Comprender su lugar en el orden jerárquico y ser conciliadora hubiera impedido que los Sussex eligieran su liberación con la esperanza de encontrar fortuna por su cuenta en Hollywood», dijo.
«Cuando vio que tenía la casita y que William y Kate eran la pareja número uno, Meghan probablemente no lo entendió y pensó: Podemos hacerlo mejor y comenzar a comercializar la familia real, y, bueno, francamente, eso no es aceptable», añadió Jobson. La pareja, que ahora vive en Santa Bárbara, California, firmó un contrato con Spotify por 26 millones de dólares para producir podcasts. Y otro de varios años con Netflix que les pagará generosamente por producir documentales, largometrajes y programas con guion.
Jobson señala que el objetivo de la familia real se centra en «servir y ayudar a los demás. No tiene que ver con ayudarse a sí mismos. Me temo que eso es lo que pasó aquí. Realmente culpo a Harry porque conocía la historia, pero quería su parte del pastel, y no puedes hacer eso. El pueblo británico financia a la familia real, es nuestra familia real, esperamos que muestren respeto. sin el pueblo británico, la familia real no existe».
Los Sussex anunciaron en enero de 2020 que habían tomado la decisión de dar un paso atrás como miembros mayores de la familia real. Tenían la intención de dividir su tiempo entre el Reino Unido y América del Norte y volverse financieramente independientes. En febrero de 2021, el Palacio de Buckingham hizo que la división fuera permanente al confirmar que el duque y la duquesa abandonarían sus patrocinios reales y no regresarían como miembros trabajadores de la familia. Harry, de 36 años, y Markle, de 39, materializaron la ruptura al sentarse para una entrevista con Oprah Winfrey en la que la duquesa birracial afirmó que un miembro anónimo de la realeza había expresado su preocupación por el color de la piel de su bebé, Archie.
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