El drama de los diseñadores y Melania Trump
Las primeras voces en contra de vestir a Melania Trump ya han aparecido, aunque también empieza a tener apoyos por el cargo que ostentará.
El vestuario de la primera dama es un clásico en Estados Unidos. Hay icónicos vestidos que se asocian a momentos históricos y son tratados como tal en los museos de Washington. Por eso estalló la polémica cuando recientemente la diseñadora Sophie Theallet, que ha vestido a Michelle Obama en numerosas ocasiones en los últimos ocho años, declaró en una carta abierta que se negaba a vestir a Melania Trump.
«La retórica del racismo, el sexismo y la xenofobia presentes durante toda la campaña presidencial de su marido son totalmente incompatibles con los valores con los que vivo.» Theallet pidió a sus compañeros de profesión que hicieran lo mismo. «La integridad es nuestra única moneda de cambio.»
Desde entonces algunas publicaciones estadounidenses, como la revista People, aseguraron que una larga lista de diseñadores se había unido al gesto de rechazo. Y era algo que habría estado ocurriendo desde hacía meses, pese al pasado como modelo de Melania Trump o sus buenas críticas en cuanto a la imagen de sus apariciones públicas durante la campaña electoral. Pero no solo importaba la imagen. Se abrió entonces un intenso debate en Estados Unidos sobre el fin de la relación entre la moda y el poder en Estados Unidos.
En plena polémica, una firma estadounidense ha salido en su ayuda: Tommy Hilfiger. «Cualquier diseñador tendría que estar orgulloso de vestir a una mujer tan bella como Melania«, declaró el diseñador jefe del imperio americano insistiendo en la necesidad de no politizar más el tema. «Todo el mundo estaba contento vistiendo a Michelle Obama también.»
No ha sido el único. «Creo que en dos o tres meses, los diseñadores contactarán con ella, porque es moda«, sentenció la diseñadora Carolina Herrera en la publicación Business of Fashion. «Y veremos a todo el mundo vistiendo a Melania. Ella representa a Estados Unidos.»
