James Franco (43) ha admitido haber mantenido relaciones sexuales con sus estudiantes más de dos años después de que lo acusaran de explotación sexual. La estrella lo detalló en una amplia entrevista en la que dijo que acostarse con estudiantes de su escuela de interpretación, Studio 4, era aceptable porque era «consensual». No obstante, negó que fuera condición indispensable para comenzar el programa de acceso a los cursos.
Admite que se acostó con sus algunas de sus alumnas, pero con ninguna de su clase titulada “Escenas de sexo”. Dice que se arrepiente de ello y reconoce que estuvo mal. Además, aclara el actor que él no seleccionó a las mujeres para estar en sus clases, y que no fue un plan previsto por su parte. También dice que hubo ciertos casos en los que hubo consentimiento por ambas partes.
James Franco dice que se dio cuenta de que dormir con sus alumnas era «un asunto deficiente» después de tener conversaciones al respecto con otras personas. Supone el actor que en aquel momento su pensamiento acerca del consenso le pareció bien y todo se redujo a su criterio, porque, en el fondo, “todos éramos personas adultas”, señala.
Las ex estudiantes Sarah Tither-Kaplan y Toni Gaal presentaron una demanda en la Corte Superior del Condado de Los Ángeles en octubre de 2019. Alegaron entonces que James Franco y otros profesores las presionaron para que se desnudaran para varias audiciones mientras les ofrecían oportunidades para intervenir en películas que rara vez se materializaban.
Así, al participar en un comportamiento inapropiado y con carga sexual hacia las estudiantes, Franco creó un ambiente de acoso y explotación sexual en la escuela. Así lo recoge la demanda publicada por The New York Times tras la que el abogado de la estrella negó haber actuado mal en ese momento.
Sin embargo, no es la primera vez que se hacen estas afirmaciones. Por este motivo James no sólo se defenderá por completo, sino que también pedirá daños y perjuicios a los demandantes y sus abogados por presentar cargos que le reportan «publicidad difamatoria«.
Según la revista especializada “Variety”, Franco resolvió la demanda por 2,235,000 millones de dólares en junio de 2021 y Franco’s Studio 4 cerró definitivamente en 2017. El actor es consciente, según sus últimas declaraciones, de que decepcionó a muchas gente; en primer lugar a sus estudiantes y luego a sus compañeros de rodaje. También admitió haber luchado contra la adicción al sexo y engañar a su entorno antes de que apareciera en su vida su actual novia, Izabel Pakzad.
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