Javier Bardem: «Trabajaría con Woody Allen mañana mismo, es un genio»

Javier Bardem la ha vuelto a liar. Esta vez ha sido en el Lumière Film Festival que se celebra en Lyon, donde ha manifestado su apoyo a Woody Allen. El actor (49) habló de su carrera durante una masterclass, en la que, entre otras cosas, reconoció haber aprendido a hablar inglés a través de las grabaciones del grupo AC/DC. Algo que le permitió, años más tarde, trabajar con directores de la talla de los hermanos Coen y de Woody Allen, que le dirigió en ‘Vicky Cristina Barcelona’, el filme rodado en España en 2008.

Allen está acusado de abusos sexuales a su hija Dylan, uno de los tres vástagos de su ex esposa, Mia Farrow. Dylan declaró en 2014 que su padre habría abusado de ella cuando era niña, aunque cuando fueron realizadas estas alegaciones, durante la problemática separación de Farrow, en 1992, el director no fue inculpado. Bardem dijo a los asistentes a su masterclass que «Allen es un genio» y que le gustaría poder volver a trabajar con él “mañana mismo”.

El actor madrileño empatiza con el director americano al extremo de estar convencido de su inocencia: “Todavía hoy, 11 años después, la acusación sigue siendo la misma. Las acusaciones públicas son muy peligrosas. Si algún día se celebra un juicio y se resuelve con una acusación, pues tal vez cambie de opinión, pero por el momento me mantengo en mis trece”.

El pasado abril, Bardem declaró a ‘París Match’ palabras similares acerca del juicio y de la opinión pública. Tras contestar que en absoluto se siente avergonzado de haber trabajado con Allen, reconoció que tuvo sus dudas acerca de las críticas al director por sus alegaciones: “Si hubiera alguna evidencia de la culpabilidad de Allen, entonces por supuesto que dejaría de trabajar con él, pero tengo mis dudas. Estoy sorprendido por este repentino tratamiento porque los juicios, tanto de Nueva York como de Connecticut, resolvieron que era inocente. A día de hoy, la situación sigue igual que estaba en 2007”.

La investigación de la New York State Child Welfare no encontró creíble la evidencia de que Dylan hubiera sufrido maltrato. La investigación de Connecticut tomó un giro polémico cuando el abogado del Estado, Frank S. Mano, anunció en 1993 que a pesar de haber encontrado un probable motivo para acusar de Allen, se vio obligado a dejar el caso porque Dylan era muy frágil para negociar en un juicio. Dylan volvió a declarar a Vanity Fair en 2013.

El asunto de estos abusos retomó fuerza con el reportaje publicado en ‘The Hollywood Reporter’ y firmado por Ronan Farrow, hijo de Allen y Mia Farrow, que desenterró toda una serie de acusaciones desestimadas en su día acerca de los abusos de Allen hacia su hija Dylan cuando ésta tenía siete años. Pero la aparición del movimiento #MeToo, que llevó a la bancarrota al todopoderoso Harvey Weinstein, declarado culpable de abusos a docenas de mujeres, arrastró a Allen, que hasta el momento no ha querido hacer declaraciones acerca del asunto y ha remitido siempre a las sentencias de los juicios celebrados.

A pesar de que el caso dio un titular que jugó a su favor, cuando Mia Farrow insinuó que el verdadero padre de Ronan no era Allen sino Frank Sinatra, siguen los problemas para Woody Allen, que no puede estrenar su última película, ‘A Rainy Day in New York‘, con un reparto en el que figuran Selena Gómez y Timothée Chalamet, a falta de distribuidora.

Tampoco encuentra financiación para su nuevo proyecto que bien podría traerle de nuevo a España, donde la productora Mediapro, a través de su fundador, Jaume Roures, ya se ha puesto en contacto con el director. Al parecer, entre la productora y el cineasta existe un precontrato de tres filmes de las cuales se han realizado dos y el tercero podría ser el nuevo de Allen a rodar en 2019.

*Foto de portada: Javier Bardem ayer en el Festival de Lyon. Gtres.