Tatum O’Neal detalla las agresiones sexuales de su infancia
No es la primera vez que habla de sus abusos pero sí de las edades a las que sucedieron y por parte de quién.
Tatum O’Neal ha colgado en Instagram un mensaje emocionante, detallando que cuando tenía 5, 6, 12, 13 y 15 años fue agredida sexualmente por hombres mayores que abusaban de su confianza y con quieres “creía estar a salvo”. Tatum, que ganó un Oscar a los diez años por ‘Luna de papel’, dice que le ha costado llegar casi a los 55 años para denunciar estos hechos, pero que ahora está lista y lo afronta con valentía.
Madre de tres hijos, habidos de su matrimonio con el tenista John McEnroe, Tatum cuenta que el primero que abusó de ella fue un amigo de su padre, Ryan O’Neal, y del novio de su madre, la actriz Joanna Moore, destruida por el alcohol y las drogas y que pasaba totalmente de ella. “De todo esto hace 35 años, yo tenía 15 y mi agresor 75, lo recuerdo todo perfectamente”, cuenta la actriz en la red.
Tatum también ataca al presidente Trump por burlarse de Christine Blasey Fred, que acusó a Brett Kavanaugh, nombrado ayer juez del Tribunal Supremo de EE.UU., por denunciar que la había agredido cuando era una adolescente, en 1982. “Cuando veo a Trump burlarse de una mujer víctima de una agresión comprendo que hemos caído en lo más profundo de una depravación y no puedo olvidar que él mismo va a hundirse también”. Ella añadió que nunca antes había contemplado el país tan oscuro, y que presiente que va a empeorar.
Finalmente, tiene una nota de optimismo: “Dejemos que el amor, amabilidad y empatía nos hagan mejores”, dijo antes de manifestar su adhesión al movimiento #MeToo. “Es hora de pelear contra este tiempo oscuro, América debe mejorar, y mejorará”, añadió.
De todos modos esta no es la primera vez que este tipo de comentarios acerca las agresiones de Tatum O’Neal salen a la luz, aunque nunca había sido tan explícita al concretar las edades en que las sufrió. En su biografía, ‘Vida de papel’, cuenta cómo su padre le dio a Melanie Griffith unos miles de dólares para que se la llevase a París. Tatum tenía12 años y relata en el libro cómo empatizó con su vecina de habitación, Maria Scheneider, reconocida lesbiana, y que con ella, Melanie y unas drogas se inició en el mundo de las orgías y descubrió su pasión por las mujeres.
Implícitamente culpa a sus padres de sus adicciones. Ryan O’Neal era un megalómano y sociópata con disfraz de galán romántico y su madre una farmacia andante. Se separaron cuando ella tenía cuatro años porque Ryan, faldero incorregible, dejó embarazada a Leigh Taylor Young, y tuvo a Patrick, su hermanastro. Y años después enloqueció por Farrah Fawcett, con quien tuvo a Redmond, futura carne de presidio.
La lista de “parejas” de Tatum es interminable, y en ella se encuentran desde duros como Jean Claude Van Damme hasta estrellas como Michael Jackson, con quien nunca llegaba a nada porque siempre tenía que marcharse.
A pesar de casarse con el tenista McEnroe la cosa no mejoró porque seguía adicta a la heroína, llegando a inyectarse delante de sus hijos, por lo que perdió su custodia. Una noche de 2008 la policía la detuvo y la multó con 95 dólares al encontrarla comprando cocaína por Manhattan. “Saben quién soy?” inquirió. Nada quedaba de una estrella cuyo Oscar a los diez años y una familia defenestrable le hicieron compartir una casa que no era un hogar.