Taylor Swift no es perfecta, aunque lleva camino de ello. Una de las cosas que más me gustan de los americanos famosos es su capacidad y generosidad para compartir con el mundo sus problemas, sus debilidades y cómo las han superado. Sin miedo, porque es un ejercicio de solidaridad con sus congéneres. Los norteamericanos, en general, hacen de sus debilidades fortalezas y de sus problemas una inspiración para ayudar. Creo que ese, además de no tener envidia, es el secreto de que sean un país que siempre avanza.
Y con la moda de las plataformas de cine online, ha llegado el momento de “las historias personales”. Biografías de toda la vida versionadas, que es mucho más agradecido. Taylor Swift acaba de presentar su “biopic”: Taylor Swift: Miss Americana.
Con el estreno de la película llegan las entrevistas, y la cantante ha contado cómo fue su trauma. Todo comenzó por la publicación de unas fotos robadas. “Se publicó una foto mía en la que parecía que mi tripa era demasiado grande, alguien dijo que me veía embarazada y eso desencadenó que dejara de comer”, le ha contado a la revista Variety, una de las publicaciones de mayor tirada en Estados Unidos.
Dejar de comer afectó directamente a su salud y a su trabajo. “Pensé que me iba a desmayar al final del espectáculo, o en medio de él”, llega a asegurar Swift en el documental. “Ahora me doy cuenta de que si comes tienes energía, te haces más fuerte, puedes hacer todos estos conciertos y no te sientes nerviosa”, afirma también la cantante. Todo un ejemplo para sus millones de fans en el mundo.
El dejar de comer, el verse gordas, es una enfermedad que no termina de erradicarse entre las adolescentes. Niñas llenas de vida que, literalmente, se ven gordas en tallas 32. Es cierto que la industria de la moda ha sido alertada desde hace tiempo, para que deje de fijarse en los cuerpos más delgados como ejemplo de lo “bonito“. En general, las mujeres no tenemos la talla 36.
Aunque para Taylor reconocer su problema ha sido complicado, es mucho mayor la satisfacción de explicarle a miles de adolescentes que su cuerpo es bonito, que no pasa nada si caen enfermas y que se puede salir con ayuda. El mensaje es muy poderoso, ya que se trata de la mujer que más dinero gana en el mundo de la música. Y es que la joven de Pensilvania es una de las artistas más influyentes del mundo y ha contado su historia. ¿Quién dijo miedo? .
*Foto principal: Gtres.
Como ya es habitual desde hace décadas, Carlos III reunirá esta Navidad a los miembros… Leer más
Tener una camiseta firmada por Messi, Lamine Yamal o Xavi Hernández y además contribuir con… Leer más
En el corazón de La Mancha y con leche cruda de oveja se elabora el… Leer más
‘El Dalí más grande del mundo’. Ese el título elegido por el Teatro Fernando de… Leer más
El grupo Kering afronta 2025 con nuevos retos y entre sus planes estaría una reorganización… Leer más
Los príncipes de Gales por fin han publicado su felicitación de Navidad. El príncipe William… Leer más