Victoria Vinuesa: «Desde pequeña supe que no estaba hecha para los estereotipos»

Tiene la espinita clavada de no haber desarrollado ninguno de sus proyectos en España. Y es que Victoria Vinuesa ha tenido que trasladarse a Hollywood para que sus historias tuviesen repercusión mediática y reconocimiento internacional. Escritora y guionista de éxito, la adaptación al cine de su libro Te esperaré en Venus se ha convertido en una de las películas más vistas en Netflix. En unas semanas empieza a rodar en Italia su nueva producción, Under the stars, que reúne en su casting a estrellas de talla internacional. Su futuro se presenta esperanzador…

The Luxonomist: ¿Qué has encontrado en el entretenimiento que no tiene otra actividad de la vida?
Victoria Vinuesa: He encontrado la posibilidad de dar rienda suelta a mi imaginación y de dar vida a unos personajes que antes se limitaban a susurrarme sus historias al oído.

TL: ¿Ya de niña eras la bohemia de la pandilla?
Victoria Vinuesa: Si te refieres a si era la rarita de la pandilla, sí, ja, ja. Desde muy pequeña supe que recorrería mundo, que no estaba hecha para la monotonía, el conformismo, las reglas absurdas ni los estereotipos. Y sobre todo, que quería aportar mi granito de arena.

TL: ¿Cuándo eres consciente de que puedes vivir de contar historias?
Victoria Vinuesa: En cuanto escribí mi primer guion (tras haber hecho un curso intensivo de quince días) tuve tan buenos comentarios que enseguida conseguí trabajos como analista y reescribiendo guiones para productoras internacionales.

“He tenido que reinventarme mil veces para lograr mi sueño”

TL: ¿Cuántas veces has tenido que reinventarte para lograr tu sueño?
Victoria Vinuesa: Mil y una. Triunfar o incluso lograr introducirse en el hermético mundo del cine en EEUU no es una tarea sencilla. A mí me han hecho falta varios años y mucha flexibilidad (e imaginación) para llegar a donde estoy.

TL: ¿Qué tienen de diferentes tus guiones para que hayan despertado el interés de Hollywood?
Victoria Vinuesa: La mayoría de los productores americanos con los que he hablado coinciden en una cosa: la intensidad y complejidad emocional de mis personajes y los mensajes esperanzadores que trasmiten mis historias. Supongo que mi formación en Psicología, junto a mi constante afán por observar y conocer el carácter humano me han ayudado a crear personajes que, sin caer en el dramatismo, hacen brotar las emociones más intensas. Por otro lado, mi mentalidad, si bien es europea, también está muy influenciada por las gentes de todos los lugares en los que he vivido. Y los clásicos del cine francés, que ofrecen una visión muy distinta de la que están acostumbrados en Hollywood.

TL: ¿Sientes que el reconocimiento en España se te resiste?
VV: Si bien no es un reconocimiento que haya buscado, sí es cierto que tengo una espinita clavada al no haber desarrollado ninguno de mis proyectos en España.

TL: ¿Nos hemos perdido una gran psicóloga?
VV: Eso nunca lo sabremos. Lo que tengo claro es que mi objetivo como psicóloga era el mismo que tengo como guionista y escritora: trasmitir mensajes esperanzadores, que ayuden, que ofrezcan una mejor versión de la humanidad y de uno mismo.

“Meterse en el hermético mundo del cine en EEUU no es fácil”

TL: ¿La guionista de cine está jubilando a la exitosa escritora de libros?
VV: No, al contrario. Disfruto mucho escribiendo en ambos medios. La escritura de guiones es concisa, estructurada, veloz y estudiada al detalle. Mientras que la escritura de libros me permite profundizar mucho más en los personajes y tomarme el tiempo de deleitarme creando nuevos mundos.

TL: ¿En tus mejores sueños imaginaste todo lo que has logrado?
VV: En mis mejores sueños logro mucho más que simples cosas materiales o éxito profesional.

TL: ¿Eres de cocinar la vida a fuego lento?
VV: En la mesa me gusta la comida a fuego lento, pero en la vida soy más bien una apasionada de los sabores intensos, sorprendentes y cambiantes.

TL: ¿Lo mejor siempre está por llegar?
VV: Lo mejor es lo que vivo a cada instante.

TL: ¿A qué momento de tu pasado regresarías?
VV: A ninguno. No hay nada como el presente.

TL: ¿Tu mayor conquista?
VV: Mi pareja.

“En mis mejores sueños logro más que cosas materiales”

TL: ¿Recuerdas ese momento de absoluta felicidad?
VV: Recuerdo muchos y, en todos ellos estoy creando una nueva historia y compartiendo momentos con las personas a las que quiero.

TL: ¿Qué no le perdonarías nunca a un amigo o a alguien a quien quieres?
VV: No hay nada que no pueda perdonar si la persona se arrepiente sinceramente.

TL: ¿Qué le preguntarías a tu yo de dentro de veinte años?
VV: “¿Qué estás escribiendo?”

TL: ¿Sin cuál de los cinco sentidos podrías vivir?
VV: Sería muy duro (pues me encanta cocinar), pero solo podría prescindir del olfato.

TL: ¿Un personaje histórico con el que te sentarías a cenar?
VV: Jesús.

TL: Diez segundos para un deseo. ¿Qué pides?
VV: Que la humanidad vuelva a su corazón. Y como en diez segundos tengo tiempo para pedir dos deseos, pido también que en el cine se incrementen las historias con alma y disminuyan exponencialmente las películas oscuras y vacías.

“Mis personajes hacen brotar las emociones más intensas”

TL: ¿De qué tipo de publicación te gustaría ser portada?
VV: Nunca me lo había planteado, la verdad. Supongo que de una revista especializada en cine como pueden ser Variety o The Hollywood Reporter.

TL: Si pudieras saber una sola cosa del futuro… ¿cuál sería o qué preguntarías?
VV: “¿Son más felices los humanos de ese futuro?”

TL: ¿Un día perfecto?
VV: Cualquiera en el que escriba y comparta con mis seres queridos. Es el cóctel perfecto.

TL: ¿Cuál es ese tema del que te avergüenza saber tan poco?
VV: Política, aunque tengo que confesar que no me avergüenzo demasiado.

«Me gustaría que disminuyeran las películas oscuras y vacías»

TL: ¿Esa película en la que te quedarías a vivir?
VV: En cualquiera de Marcel Pagnol o en alguna de las basadas en las obras de Jane Austin.

TL: ¿El lugar más loco en el que has terminado después de una noche de fiesta?
VV: No he ido de fiesta desde que terminé mi adolescencia, así que no sabría decirte. Y en serio, ¿quién quiere ir de fiesta teniendo en casa lectura, películas, música, comida y buena compañía?

TL: ¿El objeto más extraño que conservas?
VV: Un rallador de zanahorias.  En mi vida he viajado y vivido en tantos lugares y casas distintas, que hace años decidí comprarme un rallador que cupiese en mi maleta. Desde entonces siempre viajo con él, no importa dónde vaya. Hasta me estoy planteando ponerle nombre.

TL: Esa pregunta que no te he hecho y te habría gustado responder.
VV: “¿Qué le dirías a los jóvenes escritores que quieren triunfar en EEUU? Y ya de paso respondo: Les diría que un buen guion siempre termina triunfando. Que nunca tiren la toalla.