Los aromas de la grappa, el destilado italiano más famoso
Decía el maestro destilador que: “Para hacer una buena grappa solo se necesita un buen orujo y cien años de experiencia”.
La grappa es el destilado italiano por excelencia. Se elabora a partir de la destilación de los orujos de la uva o, como llaman en Italia, vinacce. La grappa italiana tal y como se conoce hoy nació en Bassano del Grappa y, según algunos, tiene unos 400 años aproximadamente.
Igual que aquí con el orujo, esta bebida suele tomarse tras una comida copiosa ya que ayuda en el proceso de la digestión. De ahí viene lo de digestivo. Algunos la añaden al café como aquí el carajillo, pero allí se denomina café corretto.
Grappas hay muchas y como en todo, hay gustos para quienes prefieren la piamontesa y otros la veneta. Recientemente he tenido el placer de conocer algunas de las grappas de Poli, una destilería que está en Schiavon, en el Veneto. Para muchos es una de las que más solera tiene y su fecha de apertura data de 1898. Cuentan con una amplia gama de grappas y hoy os quiero hablar de algunas de ellas.
(Foto: @Poli_Express Twitter)
Tipos de grappa
La Po Secca es una grappa joven y aromática elaborada a base de merlot. Son muy curiosos sus aromas a frutos rojos y tiene un sabor agradable en boca. Una opción muy fácil para quienes se inician en este destilado.
La Sarpa es una grappa que se elabora a partir de merlot y cabernet sauvignon. Esta tiene una gama aromática que además de tener fruta roja añade flores y uva fresca. Es más amplia y su recuerdo es más persistente.
La Cleopatra Moscato Oro es una de esas grappas sedosas que te transportan con sus aromas a fruta tropical y cítricos. Aquí ya hay trabajo de madera por el medio, lo que le aporta una complejidad para aquellos que quieren disfrutar de un destilado fino.
Su hermana, la Claopatra Amarone es un destilado vestido de terciopelo y al mas puro estilo elegante italiano. Con matices de frutos secos es una grappa muy perfumada en la cual se notan los años de crianza en bodega.
Cierro hoy esta cata con la Due Barili porque me parece muy peculiar, ya que combina como su nombre indica la madera de roble francés y la barrica de Pedro Ximenez de Jerez en una grappa envejecida durante dos años y a base de vino para el prosecco, esto nos da matices de cacao, uvas pasificadas y ese toque de avellana que, en conjunto, me recuerda a la Nutella.
Es muy interesante el trabajo que hay tras un destilado como la grappa y es llamativo que aquí se conozca poco o casi nada esta bebida tan parecida al orujo español y tan diferente al mismo tiempo. Seguiremos probando.
