La cerveza como parte de nuestra cultura y protagonista de nuestro ocio
La cerveza es mucho más que la bebida alcohólica más consumida en el mundo y la preferida de los jóvenes para un consumo responsable. Es un elemento fundamental en nuestras celebraciones.
Nuestro país es mundialmente conocido por el carácter abierto y afable de los españoles y nuestra increíble oferta de ocio. Sabemos celebrar como nadie de una forma sana y muy divertida y, si nos damos cuenta, no hay buena (o mala) noticia que no compartamos con amigos y familiares, tomándonos una cerveza.
Porque el consumo de esta bebida está íntimamente relacionado con prácticamente todos los planes festivos o sociales que se nos ocurran. De hecho, por algo es la bebida alcohólica más consumida en el mundo y una de las bebidas más consumidas solo por detrás del agua, el té o el café.
Motivos por los que triunfa la cerveza
Los motivos son muchos, claro. En primer lugar porque es fácil de beber, ya que no requiere de mezclas ni aliños. En segundo lugar por sus variedades, para todos los gustos y tipos de personas. Las hay Ale o Lager según su fermentación; rubias, negras o incluso rojas si nos guiamos por su color; de elaboración artesana o industrial; de procedencias distintas; con diferentes graduaciones o incluso sin alcohol.
Y en tercer lugar y más importante, porque sienta bien, ya que la relacionamos con el consumo moderado y responsable, y siempre acompañada de algún alimento.
Un alimento de la dieta mediterránea
Actualmente no hay límites para esta bebida alcohólica no destilada, fabricada con granos geminados de cebada u otros cereales fermentados en agua y aromatizada. De hecho fue declarada alimento por Real Decreto Ley y cuenta con su propio Código Oficial en el Boletín Oficial del Estado. Según un estudio realizado por la Asociación de Cerveceros de España, la cerveza es la bebida favorita de los jóvenes para un consumo responsable y su popularidad no hace sino crecer acorde a sus variedades.
Así que no es de extrañar que hayamos interiorizado la cerveza como parte de nuestra cultura y nuestro ocio, haciéndola protagonista de casi cualquier momento o celebración. Porque ¿alguien se imagina las siguientes situaciones sin un brindis con una cerveza bien fría?
Momentos en los que nunca falta una cerveza
1. Para celebrar. Siempre que alguien tiene que dar una buena noticia, se exige un brindis. La cerveza está más que presente en estos momentos que quedan para el recuerdo y que siempre relacionamos con el buen rollo, las buenas vibraciones y la diversión. Piénsalo. No hay boda, bautizo, comunión, cumpleaños, ascenso o nacimiento que celebremos sin una cerveza en la mano.
2. Para romper el hielo. Hay muchos tipos de primeras citas pero seguramente todas empiezan con un: «¿Tomamos un día una cerveza?». Aunque detrás de ella haya una cena más «formal» sin duda es una buena forma de romper el hielo.
3. Salidas con amigos y compañeros de trabajo. Es una bebida versátil e informal que se puede tomar de pie en la barra de un bar o sentados en cualquier restaurante. Para salidas con amigos, para quedadas con compañeros de trabajo a los que no conoces mucho… tomar una cerveza siempre es un buen plan.
4. Las tardes de verano. Cuando el calor aprieta es inevitable pensar en la cerveza como reconstituyente, como recompensa y como premio compartido. Porque una de sus características es la de tomarla siempre bien acompañado.
5. Un maridaje especial. La cerveza está tomando un papel importante en los grandes restaurantes y son muchos los sumilleres que se atreven a crear maridajes sorprendentes y deliciosos con ellas. Es un sector tan amplio como interesante que cada vez genera más curiosidad entre los consumidores.
6. Conocer mundo. Puesto que es una bebida de fama internacional es interesante conocer los tipos que se elaboran, comercializan y son populares en distintos destinos, tanto nacionales como internacionales. Cada cerveza nos dirá muchas cosas sobre el tipo de ocio o las preferencias de cada lugar además de ser una estupenda recompensa a un día de turismo.