Foto Unsplash @gbyz13
La gastronomía española es conocida en todo el mundo. De hecho son numerosas las veces que sus productos se erigen como los mejores del mundo en alguna categoría. Esto es precisamente lo que ha sucedido con dos vermús españoles, uno gallego y otro catalán, que se han erigido como los mejores del mundo en sus categorías en los World Vermouth Awards.
Los premios que han celebrado este año su séptima edición son concedidos por la prestigiosa revista The Drinks Report. Esta selecciona los mejores vermús del mundo en las categorías dulce, semi dulce, seco, semi seco y extra seco; además de la mejor etiqueta.
En este caso el mejor vermú dulce del mundo ha sido el gallego St Petroni Vermello. Mientras, el catalán Marnuthem ha sido reconocido como el mejor semi seco.
Sin duda son buenas noticias para el sector ya que las dos categorías son de las más consumidas en nuestro país por los amantes de este aperitivo. Pero ahí no queda la cosa. En la categoría de vermú dulce todos los seleccionados con las medallas de oro y plata son españoles.
Así, la medalla de oro ha sido para el vermú blanco Farlatti cuya empresa catalana, Vermuts Miró, ha recogido también las medallas de plata por su blanco Grisetti y su reserva Maronti.
Se suman a la segunda posición el rojo de Zecchini (Madrid) en sus ediciones normal y limitada; el reserva de Barañano Egurrez de Vitoria-Gasteiz; y el vermú rojo 987.
Y volviendo al Vermú St. Petroni Vermello, el título de mejor vermú dulce del mundo no es el único que ha conseguido en el último mes. También se ha hecho con la medalla de plata en la San Francisco World Spirit Competition en la categoría de “aperitivo”.
Lo ha hecho junto a otro de los productos de la firma vermutera nacida en Padrón en 2014. En concreto de su St. Petroni Branco, otro vermú de excelente calidad según esta competición, la más antigua, grande y prestigiosa de su género.
En cuanto a sus notas de cata, St. Petroni Vermello es de color oscuro con destellos cobrizos y en nariz destacan frutas maduras, vainilla y especias. En boca es fresco, amplio y elegante con gran volumen y recorrido. Desde la marca destacan su gusto “de golosina amarga e intensa”.
Por su parte el St. Petroni Branco es de color amarillo con destellos verdosos y en nariz es intenso, con toques minerales, cítricos y hierbas frescas. El paso por boca es equilibrado, estructurado y fresco con un volumen agradable, suave, que deja un gusto de golosina especiada.
En cuanto al mejor semi seco del mundo, Marnuthem, dicen de él que es “la unión perfecta entre vino y botánicos; acidez y dulzura”. La firma que lo elabora nace en Bell-lloc d´Urgell (Lleida) con la idea de respetar al máximo los elementos y la tradición.
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