El lujo de LVMH se hace comestible con los pasteles de Fendi, Balmain y Burberry

Esa frase tan manida de: «Comemos por los ojos» es toda una realidad cuando hablamos de alta pastelería. Aunque lo más importante de los pasteles es que estén ricos, su aspecto juega un papel fundamental a la hora de comérnoslos. Tanto es así, que en ocasiones no somos ni capaces de distinguir entre un pastel y un bolso de lujo.

Esto es precisamente lo que ha demostrado el famoso pastelero Tal Spiegel con su última línea de pasteles. Creaciones que tomaban las formas de bolsos y prendas de ropa de varias de las firmas de moda más conocidas del grupo LVMH. Unos mini pasteles hechos a imagen y semejanza de objetos de lujo, que los franceses han podido degustar en una pastelería efímera durante solo ocho días.

Los pasteles de lujo de LVMH y Tal Speigel

Que Tal Speigel ha estudiado diseño es algo que queda más que claro al ver la precisión con la que ha recreado todas las piezas. Sus pasteles han calcado las líneas del Fendi First, el Onde Stud de Valentino o el Swipe de Coperni. Así como una blazer de Balmain; unas zapatillas de Burberry; una minifalda de Courrèges y un gorro de lana de Acne Studios.

Unos divertidos y bonitos pasteles que surgían fruto de la colaboración de 24 Sèvres, la web de comercio electrónico del grupo LVMH, con el repostero. Él es toda una celebridad en Francia, donde se hizo conocido al crear pasteles y tartas que combinaban con sus zapatos. Una idea muy creativa que compartía a través de las redes sociales, donde es todo un influencer con más de 300.000 seguidores.

Los pasteles imitan las formas del Fendi First o el One Stud de Valentino

Uno de los pasteles que más ha llamado la atención ha sido el de Fendi. Tal Speigel ha recreado con gran precisión el modelo Fendi First en color turquesa, que está actualmente a la venta en la web de la firma por 2.400 euros.

La versión del pastelero es un poquito más pequeña y está hecha de merengue de pistacho, corazón de crema de castañas, mousse de pistacho y cáscara de chocolate blanco. Tal Speigel confiesa que éste ha sido el pastel más difícil de recrear por la forma del bolso, pero, sin duda, es uno de los más espectaculares.

Por desgracia, los pasteles ya no están a la venta. Solo estuvieron disponibles en una pastelería efímera que LVMH colocó en la calle Sainte-Croix de la Bretonnerie. Una pequeña tienda en la que se pudieron degustar estas deliciosas creaciones, así como contemplar las prendas y complementos en los que estaban inspiradas.