La atmósfera ochentera en Rockade, el nuevo bar de moda en Madrid
Rockade es el nuevo bar de moda en La Latina, un lugar diferente donde recordar nuestra pasión por las máquinas de Arcade de los 80 y 90.
La Latina sigue siendo uno de los lugares de moda para salir de copas por Madrid. Céntrico, rodeado de parkings y bocas de metro, a un paso del Palacio Real, de la Plaza Mayor, y del centro más castizo. Caminar por la Cava Baja es recorrer la historia de la ciudad. No saldrá el capitán Alatriste, pero la diversión está asegurada.
Y si lo que buscas es un lugar especial, hemos ido a conocer la penúltima inauguración, que en Madrid el ritmo no para. Se trata de Rockade, un lugar creado por el decorador Juan Marchante, quien ya tiene varios locales en Bilbao similares, y que desembarca en la capital con un concepto diferente: “El bar de día donde siempre es de noche”.
Rockade es un revival a nuestra infancia. A la música que nos gustó de pequeños y nos sigue gustando de mayores. Porque mientras tomas copas, puedes jugar a las míticas máquinas de pinball que están por todas partes. Porque no es sólo un lugar donde ir a picar algo al más puro estilo Street food o disfrutar de su coctelería, es un lugar donde sentirte en casa.
Missoni en La Latina con Rockade
Y si se trata de sentirse en casa, nada como una decoración única. Si vas al baño, verás un papel pintado que parece un mantón de Manila. Es de Missoni, y tiene unos colores que te enamorarán.
Cuando te sientes cómodamente en los sofás, butacas, de las diferentes salas, verás cojines llenos de motivos florales. Pensarás que por qué no tienes uno igual en casa y descubrirás que la tela sí la puedes encontrar en los lugares más chic de decoración. Pocos bares de copas con tantos detalles de lujo como éste. Recuerda fijarte en las alfombras, falta que te dejen las pantunflas para disfrutar al máximo.
Está ubicado en la calle del Almendro 9, y podrás degustar hasta 30 cervezas distintas en un lugar que no pensabas. Y si sabes un poco de historia de la ciudad, sentirás que sus muros te hablan, y en la casi cueva donde podrás “conducir” coches de velocidad como cuando eras adolescente, pero con un mejor sonido y con una buena pareja.