Brad Pitt está atrapado en un huracán de litigios sobre las casas defectuosas de su fundación ‘Make It Right’ construidas en New Orleans, y no puede encontrar una salida elegante de la tormenta. Parece que dicha fundación apenas funciona y su benefactora gestión dejó de ser efectiva en 2016, cuando se abandonó la construcción de nuevas viviendas.
De hecho, su página web no está disponible desde diciembre de 2015 y las cuentas de las redes sociales quedaron inactivas a mediados de 2017. Como la mayoría de las organizaciones sin ánimo de lucro, ‘Make It Right’ ha hecho públicas sus declaraciones de impuestos y estados financieros durante años, aunque la última presentación disponible es la del ejercicio fiscal 2014.
Hace años, la organización benéfica se asoció con otros grupos para construir viviendas para veteranos en Newark (New Jersey) así como apartamentos asequibles en Kansas City, Missouri. Los propietarios de viviendas de Nueva Orleans están demandando a Pitt y a su fundación, alegando fraude por diseños defectuosos y construcción de mala calidad.
Pitt y otros ex funcionarios de la fundación están pidiendo ser apartados de esa reclamación, y él y la organización están demandando a su vez al arquitecto que supervisó el proyecto en la devastada Lower Ninth Ward de la ciudad, el área destrozada tras el paso del huracán Katrina en 2015. La organización benéfica ha realizado reparaciones en porches en descomposición o derruidos.
En diciembre, la ciudad de New Orleans advirtió a los 109 propietarios de viviendas ‘Make It Right’ que los contadores de gas natural en sus casa podrían ser instalados incorrectamente, lo que podría provocar fugas de gas y explosiones. Para Pitt, un aficionado a la arquitectura que esperaba ser pionero en nuevos diseños para viviendas asequibles y ecológicas, la aventura ha sido un desastre embarazoso. Lo fácil para él habría sido alejarse, olvidar el proyecto, aunque entonces podría ser acusado de abandonar al pueblo al que prometió ayudar.
Pero Pitt, tras comprar una casa en el French Quartier y donar varios millones para la fundación tras el paso del huracán Katrina en 2005, estaba muy ocupado haciendo películas. Y dejó que otras personas siguieran con el proyecto que pretendía construir 150 casas más con energía verde.
El actor fue cofundador de la Fundación, pero no estuvo en la junta durante años, aunque cuando surgieron los problemas se comprometió a ayudar y corregirlos. Ron Austin, abogado de los propietarios, dice que, según sus declaraciones de impuestos de 2015, la Fundación es insolvente: “Si el Sr. Pitt logra retirarse de la demanda, estos residentes quedarán desamparados, es obvio que está tratando de cortar y correr”. El abogado añade que “mis clientes están atrapados con hipotecas a 30 años, es triste y aterrador. No tienen donde ir y no pueden darse el lujo de cambiar de residencia”. La Fundación, por el momento, da por callada la respuesta.
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